Al menos en los últimos tres años, los saltos más abruptos en el precio de la canasta básica se han dado en el trimestre entre mayo y julio.
Por El Salvador
La canasta básica en El Salvador bajó en noviembre más de $2 respecto a octubre. Sin embargo, con un precio de $255.60, aún se trata de la tercera más cara de 2023, año en el que se han reportado picos históricos en esta medición, utilizada como parámetro del costo de la vida.
Según Luis Treminio, presidente de la Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (CAMPO), la leve bajada en los precios es normal para los dos meses finales de cada año y para enero. En esta época, por ejemplo, los comerciantes de granos básicos disminuyen el valor de sus productos con el objetivo de que, cuando entre al mercado el producto de la nueva cosecha, puedan adquirirlo más barato desde los productores.
“Luego, cuando ya han acaparado todo el producto, vuelven a aumentar el precio para asegurarse más ganancias. Es una medida artificial, no es producto del mercado mismo”, comenta Treminio. Según el líder gremial, por tanto, los precios podrían experimentar aún más bajas en los próximos meses, para experimentar nuevas alzas en los días posteriores.
Según el Informe Diario de Productos Agropecuarios del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), el quintal de maíz pasó de tener un precio máximo de $31 a finales de octubre a solo $27 el 20 de diciembre, que es el último número publicado en la web de esa institución. Una disminución de $4, es decir el 13 %.
En el caso del frijol de seda nacional se está experimentando algo parecido, pues entre esas mismas dos fechas el precio máximo por quintal pasó de $110 a $98, una bajada del 11 %.
Al menos en los últimos tres años, los saltos más abruptos en el precio de la canasta básica se han dado en el trimestre entre mayo y julio, en los que se ha disparado hasta en $8.
“Es una relación bien desigual la que se da entre el productor y el comerciante. Siempre es este último el que anda ganando. Fíjese que nomás en octubre el quintal de maíz se estaba comprando hasta en $31. ¿A cuánto le está pagando el quintal ahorita el comerciante al productor? Anda en torno a los $15”, comenta Treminio.
El dirigente lamenta que la Ley Integral de Comercialización Agropecuaria no regule este tipo de conductas. Critica que haya adicionado figuras como la posibilidad de creación de empresas anónimas para la comercialización de alimentos básicos, pero no la fijación de precios justos para el productor.
“Supongo que eso era lo que más se esperaba de una ley de este tipo, que aquel que de verdad se la juega, el que siembra, tenga una ganancia justa. Pero no. La verdad que no hay un verdadero apoyo a la producción nacional”, agrega Treminio.