Activistas y juristas han señalado que el nuevo contrato mantiene los mismos vicios que llevaron a que el anterior fuera declarado inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia en 2017.
Por EFE.
El presidente de Panamá, Laurentino Cortizo, dijo este domingo que pedirá al Tribunal Electoral (TE) la realización de una «consulta popular», para que los panameños decidan con su voto si se deroga o no la cuestionada renovación de una concesión minera a una empresa canadiense.
Cortizo indicó que la consulta popular tendrá lugar el próximo 17 de diciembre, para decidir sobre la suerte del nuevo contrato entre el Estado y la empresa Minera Panamá, filial de la canadiense First Quantum Minerals (FQM), ratificado por 20 años prorrogables el 20 de octubre pasado mediante la Ley 406 por el mandatario.
«A través de la participación ciudadana, mediante el voto, podremos legitimar la voluntad del pueblo cuyo resultado será de obligatorio cumplimiento», remarcó.
Miles de panameños se han manifestado a lo largo de esta semana a nivel nacional en rechazo al nuevo convenio con Minera Panamá, que explota a cielo abierto el yacimiento de cobre más grande de toda Centroamérica.
Las protestas, que comenzaron dos días después de firmado el contrato, se han desarrollado pacíficamente pero de forma paralela a su término se han dado enfrentamientos entre grupos de personas y la policía, y también actos vandálicos y saqueos al comercio.
«He escuchado con respeto a quienes se opone al contrato ley con Minera Panamá, creo en la democracia y como presidente entiendo el clamor de la voces que se manifiestan sobre el particular», expresó Cortizo en un breve mensaje a la Nación en cadena nacional.
El mandatario también adelantó que se estará «elevando a Ley elevando a Ley la prohibición de minería metálica a nivel nacional», una moratoria que han venido exigiendo los que se oponen al nuevo pacto minero, al igual que un referéndum para que la población decida si quiere o no que Panamá sea un país minero.
Una de las primeras reacciones sobre las palabras de Cortizo fue la de Saúl Méndez, secretario general del poderoso Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Industria de la Construcción y Similares (Suntracs), quien dijo que las protestas seguirán hasta que se consiga derogar la Ley 406.
«Basta de burla, las acciones se mantienen en la calle, hay que derogar la Ley 406, ese es el mandato del pueblo», afirmó Méndez.
El líder sindical remarcó igualmente que «no hay maniobra que en esta pelea engañe al pueblo: derogatoria del contrato, para que de una vez y por todas se acabe la historia del saqueo minero de este país».
Cientos de manifestantes que siguieron desde sus celulares el mensaje del mandatario, saltaron y celebraron gritando «te ganamos, Nito, te ganamos», sin importar la fuerte lluvia que empezó a caer sobre la capital panameña.
Otros cientos de personas se concentraron en el paseo turístico de la Cinta Costera, que bordea la Bahía de Panamá, esperando el mensaje de Cortizo que inicialmente fue anunciado por el Gobierno para las 17,30, hora local, pero no fue hasta las 20,45 que se dio.
La rapidez con que el nuevo pacto minero fue aprobado por la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), firmado pocas horas después y divulgado de inmediato en la Gaceta Oficial del Estado, generó un gran descontento social que derivó en masivas protestas que han recibido una fuerte respuesta policial en los últimos siete días.
Activistas y juristas han señalado que el nuevo contrato mantiene los mismos vicios que llevaron a que el anterior fuera declarado inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia en 2017.