El Gobierno de EE.UU. sancionó anoche al expresidente Martinelli- también horas después del arribo de los hermanos- prohibiendo la entrada a territorio estadounidense a él y a sus familiares.
Por EFE
La embajadora de EE.UU. en Panamá, Mari Carmen Aponte, dijo que la sanción al expresidente panameño Ricardo Martinelli (2009-2014) por corrupción no será la «última designación» en ese país.
“Esta no será nuestra última designación en Panamá”, señaló Aponte en un comunicado difundido por la Embajada estadounidense la noche del miércoles, horas después de que los hijos del expresidente panameño, Ricardo Alberto y Luis Enrique, llegaran al país deportados desde EE.UU., donde estaban presos por el caso Odebrecht.
El Gobierno de EE.UU. sancionó anoche al expresidente Martinelli- también horas después del arribo de los hermanos- prohibiendo la entrada a territorio estadounidense a él y a sus familiares y lo acusó de estar involucrado en «corrupción a gran escala».
En un comunicado, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, anunció la medida y señaló al exmandatario por haber «recibido coimas a cambio de contratos indebidamente adjudicados» durante su mandato.
“Frenar la corrupción a nivel mundial es una prioridad para Estados Unidos, ya que la corrupción amenaza directamente nuestra seguridad nacional», declaró la reciente embajadora de EE.UU. en Panamá, que llegó el pasado noviembre para ocupar un puesto vacante desde enero de 2018.
«Sé cuán preocupados están los panameños por la corrupción y combatirla es una de nuestras prioridades como embajada porque la corrupción socava el bienestar de la población, la economía y la democracia”, agregó.
Ricardo Alberto y Luis Enrique llegaron a Panamá la noche del pasado miércoles deportados desde EE.UU., tras cumplir una condena en ese país por participar «en pagos de sobornos hechos por y bajo la dirección de Odebrecht» por un total de 28 millones de dólares.
Los hermanos Martinelli fueron escoltados desde Nueva York al Aeropuerto Internacional de Tocumen, el principal de Panamá, por oficiales de la Oficina de Detención y Deportación de EE.UU., y entregados a funcionarios del Servicio Nacional de Migración, informó la embajada estadounidense.
Ninguno de los hermanos irá a prisión porque ya pagaron una fianza de 14 millones de dólares (7 millones de dólares cada uno) por los 2 casos que están imputados por blanqueo de capitales, Odebrecht y Blue Apple (una trama de corrupción por sobornos con constructoras).
Tienen una medida de impedimento de salida del país y deben presentarse ante un juzgado los próximos días, dijeron fuentes oficiales a EFE sin precisar la fecha de notificación.
El juicio por el caso Odebrecht comenzará en Panamá el próximo agosto con 36 imputados, entre ellos los expresidentes Martinelli – y sus dos hijos- y Juan Carlos Varela (2014-2019), además de otros funcionarios de ambas administraciones.