Impulsa marca liderazgo constructivo con este proyecto emblemático.
Por Revista Summa
Una torre de concreto y acero de 112 metros de altura se erige desafiante en el corazón de la zona 11 de la ciudad de Guatemala. Es el edificio residencial Altaire, el más alto de Guatemala, ubicado en la Diagonal 17 de la colonia Mariscal. Un proyecto de la desarrolladora Impulsa, el cual se ha vendido en un 98 %.
Con un costo de US$21 millones, esta obra monumental de 32 niveles, ha involucrado a más de 20 proveedores y alrededor de 375 trabajadores activos en obra. Un proyecto que ha tomado alrededor de año y medio de construcción en sus distintas etapas: desde la demolición, movimiento de tierras y obra gris. “Según lo planificado, las entregas de las primeras unidades se realizarán en junio de 2025”, explica el director de operaciones de Impulsa, Francisco León.
Altaire es una obra que se suma a la rápida transformación del paisaje urbano con la apuesta de vivienda vertical. “Impulsa ejecuta este proyecto que supera los más altos estándares de calidad y buenas prácticas de construcción. Por eso nuestros proyectos gozan de una alta plusvalía en el mercado”, asegura el CEO de Impulsa, Juan Francisco Abril.
Estos son algunos detalles del proyecto.
Diseño panorámico
Concebido con un diseño panorámico con vista de 360 grados a la ciudad, el diseño arquitectónico es de la firma Studio Domus, de los profesionales Mauricio Barillas y José Pablo Labbé.
El concepto partió de edificar una única torre para asegurar que los residentes de los 158 apartamentos – planta en forma de T – disfruten de una visibilidad de 360 grados, con iluminación y ventilación natural. Además, goza de una extensa área con más de una decena de amenidades, entre áreas verdes, piscina, gimnasio y área de juegos.
Un hito estructural
El cálculo estructural estuvo a cargo del ingeniero Oscar Valdés, de la empresa INCCO. Esta tiene una cimentación con pilotes de más de 2 metros de diámetro y 15 metros de profundidad, diseñada en marcos rígidos, en donde incorpora muros de corte para absorber la carga sísmica.
El movimiento de tierras, a cargo de la empresa Nabilsa, contó con una excavación de 17 metros de profundidad para los cinco niveles de sótanos. Además, la internacional Rodio Swissboring, estuvo a cargo de la protección de taludes.
Por último, la estructura principal del edificio, a cargo del grupo ITSA, con una trayectoria de más de 40 años en proyectos en la región.
Otras de las características constructivas del proyecto es el pozo 1,000 pies de profundidad para el abastecimiento de agua potable, y su propia planta de tratamiento de aguas residuales, con un colector de 110 metros de longitud.
Ubicación estratégica
El edificio de Altaire toma en cuenta la necesidad de mejorar la calidad de vida de las personas, al ofrecer una opción de vivienda ubicada en un punto céntrico de la ciudad, con conexiones a los principales accesos viales como la calzada Aguilar Batres, Periférico y 13 calle, zona 11.
“La tendencia es que las nuevas generaciones desean continuar viviendo en el mismo sector en donde crecieron. Eso es calidad de vida y es parte del esfuerzo que buscamos”, concluye Abril.