Cambio en las condiciones del tiempo atmosférico, incrementan la presencia de fauna en los alrededores.
Por Revista Summa
Las condiciones meteorológicas de Costa Rica y principalmente el incremento de lluvias, han generado en el último par de años un incremento de la presencia de fauna en los alrededores de la Terminal del Aeropuerto Internacional Juan Santamaría (AIJS). A julio de este 2022, se reportan 20 eventos de fauna con aeronaves (un 50% más con respecto a lo reportado en el mismo periodo del año anterior), seis de ellos han ocasionado daños o retraso en operaciones. Como parte del Programa de Control de Fauna de AERIS, se redoblaron los esfuerzos de control y monitoreo para garantizar la seguridad operacional del aeropuerto.
“Las condiciones atmosféricas del Valle Central han cambiado con el paso del tiempo, las lluvias han aumentado y las temporadas de disponibilidad de alimento de los animales han cambiado su periodicidad, lo que genera que, por ejemplo, haya presencia de aves de la especie Vanellus chilensis (Tero, ave nacional de Uruguay), que antes del 2020 no se observaban en el AIJS. En el último año y medio hemos implementado medidas de dispersión para tratar de trasladar las poblaciones que se estaban asentando en las zonas verdes alrededor de la pista y áreas de rodaje para con esto garantizar que las operaciones sean más seguras en nuestra terminal”, aseguró Juan Belliard, director de Operaciones de AERIS.
Evitar que la fauna se encuentre en las inmediaciones de la terminal es vital, puesto que de lo contrario existe el riesgo de colisión de estos contra una aeronave, lo que puede derivar en un accidente por daños en el avión, así como damnificar un animal, incluso de alguna especie en peligro de extinción.
¿Qué acciones se realizan?
Como parte del Programa de control de Fauna, AERIS cuenta con dos coordinadores de fauna, un biólogo y un especialista en manejo de fauna silvestre, quienes disponen de una móvil adaptada de uso exclusivo para ese fin.
Las tareas consisten en monitoreo, mejoras en las áreas identificadas como problemáticas (incluye podar árboles, cerrar madrigueras, colocar púas para evitar percha de aves cerca de las áreas de maniobra, eliminación de espejos de agua, etc.), avistamientos, dispersiones por medio de láser y pirotecnia, así como captura y coordinación con entes gubernamentales para minimizar los focos de atracción de fauna.
“Gracias a las funciones y tareas de Control de Fauna, logramos monitorear hasta el momento 45 especies diferentes de aves, para un total de 8.213 individuos observados, mientras que se contabilizaron en el 2021 unas 53 especies de aves para un total de 16.429 individuos. Podemos asegurar que se mantienen poblaciones de especies que son categorizadas como de gran riesgo puesto que preocupa su estancia en cercanías del aeropuerto, como lo son zopilotes, zanates, gavilanes, caracaras, patos, teros, entre otros”, añadió Belliard.
En lo que va del 2022 se contabilizan 1.323 recorridos, distribuidos en: inspecciones de pista y patrullajes en perímetro interno y externo, mientras que en todo el año anterior se ejecutaron 2.312 recorridos distribuidos en las mismas áreas mencionadas, como parte de las acciones de patrullaje que se realizan.
En dichas rutas es habitual encontrar tortugas, perezosos, serpientes, mapaches, aves, zorros grises, entre otras especies, que son capturadas por jaula trampa o de forma manual para posteriormente, en caso de no presentar ninguna afectación física, ser relocalizadas en puntos previamente coordinados con las autoridades competentes, o bien, si están lastimadas, ser trasladadas al centro de rescate animal Zoo Ave.
Otras funciones fuera del perímetro del aeropuerto incluyen capacitaciones en escuelas de la comunidad sobre la tenencia responsable de animales domésticos, así como visitas a diferentes desarrollos pecuarios aledaños para que estén anuentes de no generar focos puntuales de atracción de fauna.
En ese sentido, con el fin de disminuir el foco de atracción y los malos olores que atraen a aves carroñeras, así como evitar que desechos líquidos y sólidos de animales en fincas cercanas al AIJS sean vertidos en ríos, mantos acuíferos o suelos, AERIS auspició un proyecto de biodigestores en un desarrollador y crianza de cerdos llamado Porcina los Tejares.
El proyecto del biodigestor disminuye la atracción de aves al sur del AIJS, pero también la mortalidad de lechones en estado prematuro quienes requieren de mayor temperatura, al utilizar parte del gas generado por el biodigestor, reduciendo a su vez el consumo eléctrico y dándole utilidad a dicho gas, para no tener necesidad de quemarlo.
“Nos enfocamos en mantener a la compañía alineada con la promoción sostenible de Costa Rica ante el mundo y los acuerdos internacionales que se traducen en bienestar para la población y el medioambiente. Estas acciones forman parte de las labores de sostenibilidad de AERIS en materia ambiental, que también incluyen la disminución de los gases de efecto invernadero, el monitoreo y medición ambiental de su operación, educación y sensibilización ambiental con colaboradores y la comunidad aeroportuaria, entre otras”, manifestó Adriana Bejarano, jefa de Ambiente, Salud y Seguridad de AERIS.