La tasa de aprobación desciende aún más cuando se mezcla la religión y la raza.
Por EFE
Los inmigrantes latinos varones tienen menos probabilidades de superar los trámites para la ciudadanía estadounidense que los inmigrantes blancos, según un nuevo estudio de la Universidad del Sur de California (USC).
El estudio «La importancia de la raza, el género y la religión en la adjudicación de la naturalización en Estados Unidos», publicado el miércoles, señaló que solo 89,9 % de los inmigrantes latinos varones obtienen la ciudadanía, casi tres puntos porcentuales por debajo que los hombres inmigrantes blancos (92,8 %).
La diferencia es más grande cuando se comparan los inmigrantes hombres latinos con las inmigrantes blancas, que logran una aprobación de 94,15 %, la más alta de todas las categorías.
Aunque las inmigrantes latinas tienen mejor porcentaje de aprobación (91,6 %) que los hombres latinos, el porcentaje está por debajo de los inmigrantes blancos, tanto hombres como mujeres, así como de las mujeres asiáticas (92,7 %) y de los hombres asiáticos (92,2 %)
Las disparidades raciales encontradas por los investigadores de USC, que analizaron más de 2 millones de solicitudes de ciudadanía presentadas por residentes permanentes de Estados Unidos entre octubre de 2014 y marzo de 2018, también afectaron a los inmigrantes hombres de raza negra, que se encuentran al final de la lista con 89,2 % de aprobación de la ciudadanía.
La tasa de aprobación desciende aún más cuando se mezcla la religión y la raza. Por ejemplo, los inmigrantes musulmanes negros también tenían índices de aprobación más bajos, alrededor de 86 %.
Emily Ryo, autora principal del estudio y profesora de la Facultad de Derecho Gould de la USC, dijo en un comunicado que los datos analizados no incluyeron detalles sobre el razonamiento detrás de cada rechazo de solicitud, una pieza clave de información que ayudaría a determinar qué conduce a las disparidades.
Sin embargo, añadió que las disparidades podrían deberse a la larga historia de Estados Unidos de utilizar la raza, el origen étnico y el género como bases de exclusión en la legislación federal.
Ryo destacó que tuvo que presentar una demanda contra el Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) para obtener los datos analizados. «Me sorprendió descubrir que USCIS nunca ha publicado datos a nivel individual sobre sus decisiones de naturalización”, dijo.
«Las disparidades persistentes que encontramos son sorprendentes y preocupantes”, subrayó.