La propuesta resolvería problemas de conectividad, eliminaría vehículos de las calles, y permitiría contar con un sistema más eficiente.
Por EFE
El Fondo Verde para el Clima aprobó este jueves US$271,3 millones como apoyo financiero para la implementación del proyecto del tren eléctrico de Costa Rica que permitirá al país avanzar hacia el desarrollo sostenible y la descarbonización de la economía.
El crédito de este organismo de Naciones Unidas se concretará a través de US$250 millones a una tasa de interés de 0%, a 40 años de plazo, con 10 años de gracia y una donación de US$21,3 millones. Los US$250 millones son para financiar parte de los US$550 millones del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Las autoridades costarricenses destacaron que esta aprobación mejora las condiciones del crédito con el BCIE que se presentó ante la Asamblea Legislativa, pasando a tener una tasa ponderada que rondaría el 1,61 %, para el crédito global de US$550 millones.
El presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, celebró en sus redes sociales la decisión y resaltó que este proyecto tendrá «enormes beneficios para el ambiente, y usuarios, impulsando la descarbonización y la economía».
El tren eléctrico interurbano tendría una capacidad para 600 personas por tren, contaría con 84 kilómetros de longitud y uniría a las ciudades de San José, Cartago, Heredia y Alajuela, ubicadas en el área metropolitana y las más pobladas del país, mediante un servicio con frecuencias de 5 minutos, dispondrá de cerca de 42 estaciones y 10 nodos de conexión con rutas de autobús.
La propuesta resolvería problemas de conectividad, eliminaría vehículos de las calles, y permitiría contar con un sistema más eficiente que facilitará la interacción con una variedad de medios de transporte como las bicicletas, los autobuses, carros, taxis y peatones.
El presidente ejecutivo del BCIE, Dante Mossi, afirmó en conferencia de prensa que este anuncio es «bueno para el país, para los ciudadanos y para el mundo», ya que permitirá una «transición hacia el transporte sostenible y bajo en emisiones».
«Este es un proyecto reconocido globalmente como un buen proyecto para Costa Rica, que va a combatir el cambio climático con un crédito blando que los países del clima le están dando a Costa Rica (…) Estas iniciativas verdes son necesarias para Centroamérica, una región que sufre mucho las consecuencias de las lluvias y sequías», afirmó Mossi.
Entre los beneficios que generaría la iniciativa se encuentran, una reducción de 7,6 millones de toneladas de CO2 durante toda su vida útil, mientras que en temas de carbono se obtendría por no emisión de alrededor US$46.000 millones de ahorro.
Además, se estima que el plan genere 1.200 empleos directos en su etapa constructiva y 1.470 en su etapa de operación.
Como parte de la propuesta, los US$20 millones que forman parte del monto de la donación del Fondo Verde servirán para contribuir a mejorar la resiliencia del cambio climático por medio de la creación de un sistema de transporte bajo en emisiones con obras complementarias al tren.
Mientras que 1,3 millones de la donación estará enfocado en mejorar las condiciones para que las mujeres puedan tener un espacio de transporte seguro y gocen de vías amplias para utilizar coches para los niños.
El crédito del BCIE será el aporte estatal al proyecto, cuyo valor total se calcula en unos US$1.550 millones, y que se planea desarrollar mediante una alianza público-privada.
El préstamo, que debe ser aprobado por la Asamblea Legislativa, es duramente criticado por algunos sectores y diputados, quienes hablan de falta de estudios de factibilidad y dudas sobre la viabilidad financiera del proyecto.