El sector turismo había preparado a sus agremiados para recibir a los visitantes con apego a las medidas de Sinager.
Por Revista Summa
Para Manuel Videa, la Semana Santa significó un aumento en las ventas en el restaurante que tiene con su padre, Manuel, en San Lorenzo (Valle), uno de los municipios que conforman el Distrito Turístico la Ruta del Sol y que han sido golpeados por la pandemia de covid-19.
«Los fines de semana recibimos bastante gente, estuvo muy bueno, comparado con las que recibimos desde que comenzó la pandemia», detalló el joven.
Ante la pandemia de covid-19, el Gobierno de la República, a través del Sistema Nacional de Gestión de Riesgo (Sinager), recomendó a la población quedarse en casa durante la Semana Santa, pero instó a ser estrictos con las medidas de bioseguridad en caso de que decidieran hacer turismo interno.
«Aquí en Manolo´s, si la gente no traía su mascarilla, no podía entrar, y en el caso de que no trajeran nosotros le brindábamos una para que pudiera entrar al local», explicó.
El sector turismo había preparado a sus agremiados para recibir a los visitantes con apego a las medidas de Sinager, por lo que se invirtió en químicos e implementos, además de la capacitación a su personal para adaptarse a esta nueva normalidad, desde que la pandemia llegó al país, precisamente semanas antes de la Semana Santa en 2020.
El Instituto Hondureño de Turismo (IHT) trabajó de cerca con la industria turística para garantizar que los prestadores de servicio implementaran los protocolos de bioseguridad, aunque haciendo énfasis en que es responsabilidad de cada ciudadano cuidar su entorno y a sí mismo.
«Nos hemos ido preparando desde febrero, trabajando de forma constante en conjunto con la Cámara de Turismo y con todo el gremio turístico, para verificar que la industria está lista con todas las medidas de prevención», indicó la ministra de Turismo, Nicole Marrder, antes de las movilizaciones de hondureños.
Recordó que para la industria este feriado es importante para poder respirar un poco, pues el año anterior se cancelaron varios feriados y eso los ha mantenido en una situación económica difícil.
Reservas por la pandemia
Tras una Semana Santa y un Feriado Morazánico 2020 con restricciones de movilización que pasaron una fuerte factura a la industria sin chimenea, ésta era esperada con mucha esperanza.
La fecha sí viene a dar un respiro a quienes se dedican a esta industria, pero siempre hubo una parte de la población que tuvo sus reservas ante la pandemia.
El viceministro de Turismo, Selvin Barralaga recordó que la industria del turismo es una cadena que se desarrolla desde el más pequeño al empresario mayor y que en la Semana Santa ha llegado a generar más de 30.000 empleos temporales.
En el Distrito Turístico la Joya de los Lagos, Lourdes Erazo afirmó que el flujo de visitantes a la zona del canal del Lago de Yojoa no fue como en años anteriores debido a la pandemia y que el mal clima afectó desde el viernes, pero indicó que está agradecida con Dios porque lo importante es cuidarnos de la covid-19.
«Por lo general en Semana Santa recibimos unas 50.000 personas y esta vez quizá fueron unas 15.000, pero no perdemos el ánimo, seguimos luchando», indicó Erazo, que se dedica a la renta de kayaks en la aldea Los Naranjos, Santa Cruz de Yojoa (Cortés).