El acuerdo beneficiará a por lo menos 80.000 empresas que representan cerca de 400.000 puestos de trabajo que quedaron prácticamente inactivas durante la emergencia.
Por Revista Summa
El acuerdo del Gobierno con el sistema bancario nacional representa un «salvavidas» para millares de micro, pequeñas y medianas empresas que estaban al borde del colapso financiero debido a la contracción de la economía a consecuencia de la emergencia provocada por la covid-19.
Así lo expresó este día el secretario Coordinador General de Gobierno y coordinador del Gabinete Económico y Social, Carlos Madero.
Apoyo al sector social
El funcionario reiteró que para el Gobierno de la República una de sus prioridades ha sido salvar vidas y por eso en la primera etapa de la emergencia orientó sus esfuerzos a fortalecer el sistema de salud, instalar el mayor número de centros de triaje, conformar más brigadas de campo e implementar programas como Fuerza Honduras.
Madero explicó que el aspecto de salvar empleos tiene que ver con la reactivación de la economía «y no se puede reactivar la economía si las empresas no pueden resolver sus problemas de deuda, de manera que el acuerdo con el sistema financiero representa como la piedra angular de lo que representa la reactivación económica».
Agregó que el Gobierno continuará manteniendo la ayuda social, fortaleciendo y ampliando el sistema de salud y paralelamente impulsando la reactivación económica.
«Parte fundamental de esto era llegar a un acuerdo de alivio financiero para el sector microempresarial, porque no sería posible que esas empresas se acogieran a fondos de reactivación si antes no consolidaban sus deudas», manifestó.
El acuerdo beneficiará a por lo menos 80.000 empresas que representan cerca de 400.000 puestos de trabajo que quedaron prácticamente inactivas durante la emergencia.
Consolidación de deudas
Según Madero, el acuerdo de consolidación y reestructuración de deudas era crucial, pues de lo contrario muchas empresas no podrían sobrevivir, de manera que el acuerdo viene a ser como un salvavidas.
Refirió que, de conformidad con el convenio financiero, todas las empresas deberán tener consolidadas y reestructuradas sus deudas al 31 de diciembre, por salud de las mismas empresas y del sistema financiero mismo.
Lamentó que, a pesar de este «salvavidas», muchas micro y pequeñas empresas no van a poder recuperarse; de hecho, muchas ya desaparecieron. «Es una realidad que no se puede evitar, pero habrá muchas otras que podrán ser rescatadas», afirmó.