En medio de las situaciones críticas, reaccionar a tiempo y aplicar cambios en los momentos justos, son claves para la sobrevivencia de las empresas.
Por Revista Summa
El COVID-19 se ha extendido por todo el mundo y para proteger la seguridad y la salud de todos, las principales actividades sociales se han estancado y la economía mundial se ha visto gravemente afectada. La situación está cambiando rápidamente y muchas organizaciones enfrentan desafíos severos, las mejores prácticas de su historia han fallado repentinamente y no se sabe cómo proceder.
Ante este panorama, Franklin Wang, Gerente Comercial de Banco Cathay le brinda una guía para reorganizar, reenfocar, reinventar y revisar puntos que podrían ser importantes para los empresarios en su toma de las decisiones: Colaboradores: Proteger los activos más importantes de la empresa.
La fuerza laboral es el activo principal de la organización y su talento un tesoro para destacar frente a la competencia.
Forme un equipo de liderazgo interfuncional para evaluar y responder al impacto cambiante de la epidemia.
Instaure una plataforma de comunicación multicanal para garantizar el trabajo en equipo.
Realice periódicamente comunicación interna y externa con información relevante.
Diseñe y ponga en práctica un protocolo para manejar la comunicación en medio de una emergencia.
Establezca un sistema de retroalimentación de los empleados para evaluar la efectividad de la continuidad del negocio, así encontrar omisiones y mejorar la planificación futura ante las emergencias. Clientes y Socios comerciales: Fortalecer la confianza.
Revise el modo de comunicación para evitar que los clientes y socios reciban información unilateral, poco clara e inexacta.
Deje en claro al público que las instalaciones y los productos de su organización son seguros e higiénicos, y explique qué cambios se han realizado con este fin.
Formule estrategias de comunicación, determine el alcance de comunicación y realice un comunicado individual con los clientes y socios comerciales más importantes.
En este momento, es mejor una comunicación excesiva que una insuficiente.
Establezca un mecanismo multicanal para investigar y resolver problemas, así como un mecanismo de respuesta apropiado.
Formule planes, solicite activamente comentarios inmediatos sobre comunicaciones, actividades, productos y servicios, y publique y mejore continuamente diversas tareas.
“El elemento central de cualquier relación es la confianza. Este vínculo debe ser probado y nuestras acciones tendrán un profundo impacto en el futuro de la relación de cooperación. Si se responde adecuadamente, la crisis es una oportunidad de estrechar las relaciones con sus clientes y socios”, destaca Wang.
Finanzas y Operaciones: Tome el control de todas las posibilidades
Defina una «torre de control» para la gestión de crisis, permita que los principales líderes formen una fuerza conjunta, garanticen una respuesta centralizada y den una voz coherente en toda la empresa.
Cree una plataforma digital, optimice el aumento del tráfico, tenga funciones confiables de administración de pedidos y cumplimiento de contratos de contactos múltiples, y use datos para identificar las informaciones reales en demanda.
Establezca un sistema de rutina para la evaluación continua del inventario, la cadena de suministro y siempre esté atento a que los datos que se trasladen eficientemente al segundo y tercer nivel de oferta y demanda, o sea nuevos mercados.
Continúe explorando modelos de personal y aproveche la mano de obra móvil: las nuevas capacidades digitales; las oportunidades de automatización y de la inteligencia artificial.
Evalúe el impacto del estado de resultados y el balance general, y responda a las pérdidas financieras definiendo varias «líneas de detonación» y formulando planes a corto y mediano plazo.
En la operación de la organización: la interdependencia está en todas partes y podría tener tres áreas que pueden reflejar esto mejor: la cadena de suministro, la línea de producción y el canal de distribución. Las empresas necesitan identificar rápidamente y centrarse en lo que saben y pueden controlar, y actuar en
consecuencia. En este momento, un modo de pensamiento ágil y flexible es particularmente importante.
Responsabilidad social: Cómo podemos apoyar a los demás.
Desarrolle un plan de comunicación externa para mantenerse a la vanguardia y controlar la situación en la comunicación con el público, los medios, las comunidades, los líderes gubernamentales y los líderes de empresas pares.
Comparta de manera sincera y transparente cualquier información corporativa o recursos que puedan ayudar a contener o comprender la situación de la pandemia ante sus colaboradores o en sus burbujas sociales.
Apoye y resalte las medidas de restricción sanitaria dictadas por las autoridades, así promueve la información exacta y su aplicación correcta.
Para Wang, en medio de las situaciones críticas, reaccionar a tiempo y aplicar cambios en los momentos justos, son claves para la sobrevivencia de las empresas.
“En la sociedad actual, ninguna organización puede estar sola, para sobrevivir a este difícil período y crear un futuro prometedor para el mundo, es necesario trabajar juntos. En este momento la participación en el apoyo social debería de ser un interés organizacional, esto para demostrar nuestras habilidades de liderazgo empresarial, crecer y fortalecer la confianza e imagen de la empresa” finalizó.