A pesar de que las condiciones para Centroamérica vislumbraron una mejoría en términos prospectivos, el 2020 trae desafíos importantes.
Por Revista Summa
El Informe Económico Regional agosto 2019-2020, elaborado por la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (SIECA) y la Secretaría Ejecutiva del Consejo Monetario Centroamericano (SECMCA), instituciones regionales
especializadas del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), destaca que la economía regional en 2020 se contraería hasta en un -6.8%, alcanzando un valor incluso más crítico tomando como referencia la experiencia de la crisis económica de 2008-2009.
La actividad económica de la región fue impactada debido a las medidas sanitarias impulsadas por los países miembros del SICA ante la crisis sanitaria que enfrenta desde marzo la región y el mundo, la COVID-19, según el estudio las consecuencias serán significativas en términos económicos y comerciales.
El Secretario General de la SIECA, Melvin Redondo, resaltó que “el Informe Económico Regional es un aporte institucional de la SIECA y la SECMCA para la promoción de espacios de discusión en torno de aquellos aspectos determinantes para el desarrollo de la región, pero también para la toma de decisiones en favor del proceso de integración económica centroamericana”.
“Desde inicios de 2020, nos enfrentamos a una profunda crisis de salud pública con consecuencias altamente perjudiciales para las actividades económicas en nuestros países. Para salir airosos de esta situación, el consenso apunta a una mayor integración económica regional y una creciente cooperación internacional”, indicó Domingo González, Secretario Ejecutivo del CMCA.
El Secretario General del SICA, Vinicio Cerezo,
ha destacado en otros espacios que las economías estarán en términos negativos para finales de 2019 y que será hasta el 2021 que recuperarán el nivel de crecimiento que tenían en 2019.
“Considero que, con las medidas adecuadas, el comercio intrarregional y el turismo, serán los sectores que más rápido pueden recuperarse, son sectores dinámicos y en los que se están concentrando muchos esfuerzos”, ha reiterado Cerezo.
Informe con hallazgos y análisis de contexto internacional
El informe está distribuido en ocho capítulos y hace un análisis sobre el contexto internacional; abordando temas como crecimiento económico y dinámica de precios; Sector Fiscal; Comercio internacional; Balanza de pagos; Sector Monetario y Financiero; Entorno de Negocios y Facilitación del Comercio; y Perspectivas Económicas Regionales de Centroamérica para 2020-21.
“Los efectos en el corto, mediano y largo plazo, dependerán de la magnitud y duración de las medidas implementadas para disminuir los contagios. Sin embargo, uno de los primeros efectos para la región se prevé que será el deterioro del comercio con los principales socios comerciales. La debilidad de las finanzas públicas también se verá agudizada por las necesidades de incrementar el gasto público ante la crisis de la pandemia de COVID-19”, dice el Informe Económico Regional.
Por otra parte, ante la dinámica reciente de la economía mundial todos los países de la región han ajustado sus proyecciones de crecimiento que van (en promedio) desde 0 (República
Dominicana) hasta -7.5% (El Salvador y Honduras). Estas estimaciones no tienen precedente en la historia reciente de la región y reflejan tanto el alto grado de incertidumbre en relación con el desempeño de la economía global como los efectos de las medidas de confinamiento y distanciamiento social que se han implementado para prevenir la expansión del COVID-19.
Entre los efectos económicos importantes en el corto plazo está el deterioro del comercio con el principal socio comercial de la región: Estados Unidos, que llegó a representar en 2019 el 45% del total transado con el resto del mundo, y de este país se adquieren una diversidad bienes (consumo, intermedios y de capital) que llegan a pesar el 38% de las importaciones de Centroamérica, Panamá y República Dominicana; además la pérdida de empleos en EEUU y por ende una caída en los flujos de las remesas familiares.
“Se prevé que las remesas a los países de América Latina y el Caribe disminuirán en un 19%. Esta situación es particularmente relevante para El Salvador y Honduras (recibieron más del 20% del PIB en remesas durante 2019), Guatemala (13.8%) y la República Dominicana (8.0%). Si se mantuvieran las proporciones estimadas, el impacto de la caída en las remesas para la región de Centroamérica, Panamá y República Dominicana, sería cercano a los USD 6 mil millones”, señala el documento.
En 2020, se espera que la inversión extranjera directa disminuya más del 35% debido, debido a las prohibiciones de viaje, la interrupción del comercio internacional y a la caída de los precios de las acciones de las empresas multinacionales con su respectivo efecto en la riqueza.
Bajo la frágil situación del contexto internacional, la región centroamericana mostró una leve mejoría en el valor de las exportaciones totales, por encima de lo registrado en 2018. Este desempeño resultó favorable a pesar de haber presentado un menor dinamismo en la demanda interna. Cabe destacar que en 2019 la región mantuvo relativa estabilidad en los intercambios comerciales con sus principales socios.