ManpowerGroup en alianza con otras firmas de la industria de Recursos Humanos realizó una investigación, con las mejores prácticas para operar de manera segura, sana y productiva.
Por Revista Summa
En su primera iniciativa, la alianza realizó una investigación en 13 países y en cinco sectores específicamente en salud, seguridad e iniciativas de bienestar que apoyen la reapertura de negocios y comercios.
Andrés Soto, Gerente de País de ManpowerGroup Guatemala indicó, “Esta investigación es un aporte para las organizaciones en su plan de regreso al trabajo seguro. Esta planeación cuenta con tres partes esenciales, identificación de riesgos y control; evaluación y desarrollo de un mapa y plan de regreso al trabajo; y finalmente, implementación, medición, evaluación y ciclo de retroalimentación”.
A continuación se detallan buenas prácticas de Una Guía Práctica para un Regreso Seguro:
- Evitando el riesgo de salud en el lugar de trabajo. Si el home office/trabajo remoto fue exitoso, se recomienda que evaluen extenderlo, considerando aspectos de ciberseguridad y compromiso de los empleados. Mantener retroalimentación y estar al tanto del bienestar de las personas.
- Comunicarse interna y externamente es de importancia crítica. Se debe seleccionar los canales y las herramientas más apropiados para comunicar en temas relacionados con la salud, expectativas de conducta e información sobre las regulaciones. Las medidas para comunicar van desde capacitación en línea sobre seguridad y salud del trabajador, posters sobre lavado de manos y otras reglas críticas de higiene.
- Provisión de suficientes cantidades de equipo de protección personal, productos y facilidades sanitarias. Las organizaciones definen sus propios estándares de protección y son responsables de cumplir con las reglas de gobierno local o nacional, como proveer del equipo de protección personal (PPE) correcto y sanitizantes antes de volver a empezar operaciones.
- Distanciamiento físico. Establecer y aplicar una regla de distanciamiento físico alineada a los requerimientos de gobierno. Apoyar su cumplimiento a través de comunicaciones y con marcación física en pisos, paredes, áreas de trabajo, pasillos, todo como un recordatorio de las reglas establecidas.
- Barreras físicas para reducir la infección. Las barreras físicas son vitales ya que reducen y previenen el esparcimiento del virus. Son igual de importantes para la operación funcional del negocio, además de que reducen el ausentismo por enfermedad.
- Limpieza. Limpieza de todos los puntos que se pueden tocar, perillas de puertas, barandillas, botones de elevadores, grifos y áreas de recreo; es importante y recomendable que se establezcan horarios sistemáticos y visibles para toda la fuerza de trabajo.
- Pruebas, vigilancia y monitoreo de la salud. Una compañía necesitará asegurarse del monitoreo de la salud, la evaluación y vigilancia de protocolos que se adhieran a las reglas de gobierno del lugar de trabajo.
- Reporte de infección y control. Las compañías deben seguir y aplicar procedimientos y publicar consejos de su gobierno local o nacional.
- Viajes y logística. Las empresas deben planear en la base de que los acuerdos de trabajo alternativo para compensar viajes son adecuados al momento y pueden extenderse. Las empresas que envían y reciben artículos a través de correo o las de carga también deberá desarrollar protocolos complementarios, en coordinación con las compañías de logística.
- Continuidad de negocio. La organización debe mantener un enfoque de equipo multidisciplinario para dirigir la continuidad del negocio día a día, mes a mes; y actualizar los planes de contingencia para la seguridad y eficiente operación del lugar de trabajo mientras la amenaza de COVID-19 evoluciona.
- El rol de la administración y liderazgo. Los líderes más senior necesitan apropiarse del esfuerzo de respuesta a la pandemia y liderar al frente.