Análisis se desarrolló con base de datos anonimizada elaborada tras 37.741 encuestas.
Por Revista Summa
Una reciente investigación, desarrollada por el economista y máster en estadística de la Universidad de Costa Rica (UCR), Andrés Fernández, demostró que sí es posible disminuir la pobreza usando la métrica del IPM como una herramienta para la gestión de políticas sociales. Esta afirmación es su conclusión tras el estudio realizado con el Programa IPM empresarial (IPMe), donde hubo una disminución en la pobreza multidimensional en hogares de colaboradores de empresas que han implementado esta herramienta, un hito histórico que se da por primera vez en el mundo, y posiciona a Costa Rica como país pionero en aplicar esta metodología.
El tamaño del análisis a los colaboradores de las empresas participantes del IPMe equivale a cerca del 2% de los hogares que tiene Costa Rica. De acuerdo con el estudio, el programa IPMe desarrollado por la Asociación Horizonte Positivo se ha aplicado en más de 70 empresas de distintos sectores productivos y ha beneficiado a más de 30 mil personas. “Basado en los datos, puedo afirmar que es la iniciativa privada que más impacta en hogares vulnerables desde el sector privado, pues a nivel nacional no existen evidencias de iniciativas privadas con tal alcance y efectividad” indicó el investigador, Andrés Fernández.
El índice de Pobreza Multidimensional es una métrica de pobreza elaborado por Oxford Poverty & Human Development Initiative que se utiliza en más de 100 países, aceptada por el Banco Mundial (BM) y Naciones Unidas (ONU) como métrica oficial, la cual brinda un análisis integral de indicadores como salud, educación, vivienda, empleo, y estándares para determinar factores que inciden en la condición de pobreza.
El IPMe es una adaptación del Índice de Pobreza Multidimensional (IPM) para el sector empresarial desarrollado por la Asociación Horizonte Positivo en el 2017 con el apoyo técnico de Oxford Poverty and Human Development Initiative (OPHI). Fue en Costa Rica que se utilizó esta herramienta por primera vez para el sector productivo, por su impacto, ya que es el sector generador de cerca del 86% del empleo en el país.
“Nos sentimos sumamente orgullosos del resultado del programa que sitúa a Costa Rica y el sector privado como un modelo de Responsabilidad Social Empresarial (RSE); particularmente, en tiempos tan desafiantes. Desde las empresas que han sido parte del programa se han desarrollado más de 9 mil acciones concretas para propiciar bienestar multidimensional, aportar en la disminución de la pobreza multidimensional y con el alto nivel de endeudamiento que afecta a miles de colaboradores y sus hogares”, señaló Mariola Montero, directora ejecutiva a.i. de Horizonte Positivo.
Tras el análisis, se concluyó por parte del investigador que la pobreza multidimensional sí se redujo en los hogares de los trabajadores que participan del programa e indicó que hubo acciones que mejoraron directamente los indicadores que conforman el IPM, entre ellos educación, específicamente, apoyos dirigidos para que los colaboradores finalicen la secundaria (bachillerato) y mejoren sus capacidades, como también acciones en vivienda, para la reducción del hacinamiento en los hogares, entre otras.
“Sí es posible notar que el nivel de pobreza multidimensional de los colaboradores de las empresas que han participado del IPMe ha sido cercano al 14%, inferior al porcentaje de IPM del país, que ha rondado entre el 16% y el 19% entre los mismos años, pero muy cercano al porcentaje de pobreza multidimensional de las zonas urbanas según la medición efectuada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), que ha oscilado entre el 12% y el 14,5%” señala la investigación de Fernández.