Los profesionales de Consortium se mantienen en actualización continua y adaptan sus servicios a la dinámica del entorno.
Por Daniel Rosales / Danielrosales_4
Para afianzar su liderazgo, ante los desafíos de la actual revolución tecnológica Consortium abrió una práctica Fintech en la región, nicho visto como la intersección entre los servicios financieros, las nuevas tecnologías y la regulación. Gracias a la especialización y preparación de la firma, ha logrado incorporar con agilidad a miembros altamente capacita- dos para acompañar adecuada- mente a sus clientes en los problemas jurídicos que conllevan las nuevas iniciativas del mercado.
“Entendimos que, así como las industrias estaban sufriendo un cambio, nuestra firma también debía cambiar, incorporando elementos tecnológicos a nuestros servicios y capacitando mejor al equipo en las nuevas tecnologías. Creemos que para poder asesorar de forma correcta a los clientes lo primero es que nosotros entendamos con claridad el mercado”, explica Randall Barquero, especialista en Fintech de Consortium.
La especialización de sus abogados en estos temas ha permitido que el sector financiero tradicional que ya atendía los visualice como socios de confianza para tratar los nuevos contenidos, al igual que nuevos clientes de startups Fintech.
“Mantenemos una asesoría muy activa a emprendimientos locales y regionales en sus operaciones diarias. También apoyamos a entidades financieras que desean mantenerse actualizadas y respaldadas en sus procesos de transformación digital y los desafíos regulatorios que enfrentan, materializando la integración de las soluciones tecnológicas al sector financiero”, explica Daniel Leiva, otro de los especialistas de la firma.
A la vanguardia
Pensando de forma disruptiva, Consortium dota de soluciones a sus clientes y los asesora en el análisis de nuevos productos y servicios digitales, incluido el diseño de las estrategias legales aptas para los diversos mercados donde operan, conforme con la legislación aplicable en cada país y bajo enfoques innovadores, centrados en que puedan realizar los negocios que se proponen.
Dado que el mundo está cambiando y cada vez son más los legisladores y reguladores que fomentan la adopción de criptomonedas por medio de regulaciones novedosas, la firma sigue muy de cerca dicha evolución a nivel internacional, al igual que las recomendaciones de organismos internacionales, como GAFI. “Estamos siempre al tanto de las tendencias normativas locales, con la meta de ser actores de cambio, propiciar el desarrollo del sector y tutelar los intereses y derechos de los consumidores”, añade Leiva.
Su acción en El Salvador
Desde la entrada en vigor de la Ley Bitcoin en ese país hasta la fecha, la compañía ha podido ver como el ecosistema ha ido creciendo y marcando hitos. Su función acompañar a algunas Fintech para que en lugar de cambiar su modelo de negocios amplíen su portafolio de servicios y se conviertan en soluciones integrales que permitan atender a clientes desde ambas ópticas: los medios de pago tradicionales y el pago con criptomonedas.