El BPC anunció también ayer rebajas a los requisitos de reserva bancaria para liberar unos US$140.000 millones de liquidez en el mercado.
Por EFE
El Banco Popular de China (BPC, banco central) anunció este miércoles una rebaja de 30 puntos básicos, desde el 2,3 % al 2 %, a una de sus principales herramientas para financiar a los bancos comerciales, los denominados servicios de préstamos a medio plazo (MLF, por sus siglas en inglés).
El gobernador del BPC, Pan Gongsheng, había avanzado esta rebaja en una rueda de prensa celebrada este martes, en la que anunció un paquete de medidas de estímulo para reavivar la recuperación de la segunda economía mundial.
En un comunicado publicado en su página web, la institución indicó hoy que llevó a cabo una operación vía MLF por 300.000 millones de yuanes (42.744 millones de dólares, 38.188 millones de euros) a un año con una tasa del 2 %.
La última rebaja, del 2,5 % al 2,3 %, se había llevado a cabo a finales de julio.
Los MLF son una herramienta creada en 2014 para financiar a los bancos comerciales y orientar los tipos de interés de referencia, denominados LPR. Cuando se rebajan, significa que se reduce el costo del dinero que se presta a los bancos.
Pan también adelantó ayer que las LPR bajarán próximamente entre 0,2 y 0,25 puntos porcentuales.
Entre las medidas más destacadas que se anunciaron en la mencionada rueda de prensa figura una rebaja de 0,2 puntos, desde el 1,7 % al 1,5 %, de las tasas a los acuerdos de recompra inversa (‘repos’) a 7 días, una de las principales y más habituales herramientas del BPC para inyectar liquidez al sistema financiero.
Este lunes, el banco central había rebajado en 10 puntos básicos las tasas a las ‘repos’ a 14 días, hasta el 1,85 %, aunque en este caso se trataba únicamente de alinearlas con las efectuadas a 7 jornadas vista ya que esta herramienta más prolongada suele emplearse únicamente antes de períodos vacacionales como el que cubrirá la primera semana de octubre, por el Día Nacional.
El BPC anunció también ayer rebajas a los requisitos de reserva bancaria para liberar unos 140.000 millones de dólares de liquidez en el mercado, reducciones a los tipos de las hipotecas existentes -ahorrando unos 21.000 millones de dólares a 50 millones de hogares- o mecanismos para apuntalar el mercado de valores cifrados en unos 114.000 millones de dólares.
Según los expertos, el paquete de estímulos supone «un paso en la dirección correcta» aunque será «insuficiente» para reavivar la recuperación económica china a menos que venga acompañado de un mayor gasto público, una cuestión que podría chocar con las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la deuda.
Las medidas se anuncian no solo tras esa bajada de tipos en Estados Unidos sino también después de que los datos económicos de agosto en China fueran peores de lo esperado y de que el presidente chino, Xi Jinping, llamara a elevar los esfuerzos para conseguir el objetivo de crecimiento económico para este año, de en torno a un 5 %.
La baja demanda nacional e internacional, unida a riesgos de deflación, estímulos insuficientes, una crisis inmobiliaria que no ha tocado fondo o una falta de confianza en el seno de los consumidores y el sector privado son algunas de las causas que esgrimen los analistas para explicar lo que ocurre en la segunda mayor economía mundial.