El Banco Central de Reserva (BCR) no ha dado detalles del monto de remesas familiares que ingresan al país mediante la billetera gubernamental.
Por EFE
El Salvador cumple este jueves un mes desde la adopción del bitcóin como moneda de intercambio legal junto al dólar, efeméride que se cumple entre dudas con la transparencia en el manejo de fondos estatales y denuncias de supuestas suplantaciones de identidades para cobrar un bono.
El 7 de septiembre pasado, el país centroamericano se convirtió en el primero del mundo en darle curso legal al más popular de los criptoactivos.
El Gobierno de Nayib Bukele lanzó una billetera digital con la que, además de dar un bono en bitcóin equivalente a 30 dólares para promover su uso, busca atraer los más de 5.000 millones de dólares en remesas que el país recibe cada año, principalmente de Estados Unidos.
LOS NÚMEROS DE BUKELE
Desde que se implementó la adopción del bitcóin, la principal apuesta económica del Gobierno, la cuenta de Twitter del presidente Bukele se ha convertido en la única fuente de información oficial sobre el tema, sin que alguna institución proporcione más datos que permitan contrastar.
El gobernante aseguró el miércoles que «están insertando más efectivo» para comprar bitcóin y «que lo que están retirando» de los cajeros de la billetera Chivo.
Añadió que «si sumamos las remesas» de «casi 2 millones (de dólares) por día», el dinero entrante cuadruplica la salida y «esto es muy sorprendente tan temprano en el juego».
El Banco Central de Reserva (BCR) no ha dado detalles del monto de remesas familiares que ingresan al país mediante la billetera gubernamental.
Bukele señaló el pasado 3 de octubre que «3 millones de salvadoreños ya están usando @chivowallet (billetera Chivo).
El mandatario no detalló si esta cifra corresponde únicamente a quienes descargaron la aplicación o también a los comercios.
A finales de septiembre, el presidente salvadoreño publicó un cuadro con distintas cifras que señalan que la llamada «Chivo Wallet» contaba con 2.255.936 de «usuarios totales», aunque una gráfica apuntaba que los «usuarios registrados» rondaban los 2,5 millones de dólares.
Con la cifra de 3 millones de usuarios registrados para obtener el bono, el Gobierno habría desembolsado 90 millones de dólares.
LA EMPRESA CHIVO
De acuerdo con publicaciones de medios locales, la billetera Chivo pertenece a una empresa privada creada hace 22 años por la autónoma Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL).
Según El Faro, la sociedad se llamaba originalmente «Inversiones El Salvador No. 1» y desde el 24 de agosto se llama Chivo S.A. de C.V. y nació con una inversión inicial de 60 millones de dólares.
La Asamblea Legislativa le dio al Gobierno más de 200 millones para la adopción del bitcoin, de los que se desconoce a detalle su uso.
De estos fondos se destinaron 150 millones de dólares a un fideicomiso —fondo— para que lo administrara el Banco de Desarrollo de la República de El Salvador (Bandesal).
Recientemente, la Unidad de Acceso a la Información Pública de este banco declaró que no posee un expediente que aclare su relación con la empresa Chivo.
Representantes del Centro de Asesoría Legal Anti Corrupción en El Salvador (Alac) pidieron a Bandesal, a inicios de septiembre, la «copia del expediente administrativo de la contratación de servicios» con la sociedad Chivo.
Este tendría que contener «el contrato que conste los términos y la relación jurídica del Gobierno de El Salvador a través de Bandesal y la Sociedad Chivo S.A. de C.V., las garantías correspondientes».
IDENTIDADES ROBADAS
La Asociación Tracoda, que se dedica a impulsar la transparencia en El Salvador, señaló este jueves que «ha recibido múltiples quejas de usuarios que aseguran que han sido víctimas de suplantación de identidad».
Estas denuncias están vinculadas al registro del Documento Único de Identidad (DUI) en la billetera Chivo «para cobrar el bono de 30 dólares».
Diversas denuncias se han hecho mediante las redes sociales, sin que se conozca una postura oficial sobre el tema, ni la Fiscalía ha anunciado la apertura de una investigación penal.
Entre otras acciones, Tracoda recomendó denunciar ante la Fiscalía General de la República, acudir a la Defensoría del Consumidor y a soporte técnico de la aplicación.
EL ALZA DEL BITCÓIN Y LAS PROTESTAS
La entrada en vigencia de la Ley Bitcóin se vio marcada por protestas contra el Gobierno, que se han repetido el 15 y el 30 de septiembre, y una caída en los precios.
Son 700 bitcoines los que ha comprado el Gobierno salvadoreño, sin que se conozca mayor información más que la publicada por Bukele en Twitter.
Las compras se realizaron el 6, 7 y 19 de septiembre y, de acuerdo al valor pagado, representaron una inversión de más de 35,2 millones, según la revista Disruptiva, de la privada Universidad Francisco Gavidia.
Hasta el 4 de octubre pasado, el valor de estas monedas cayó en más de 2 millones de dólares, pero con las alzas registradas en los últimos días se revalorizaron.
De acuerdo con este análisis, hasta la noche del 6 de octubre, su valor creció en 3,1 millones de dólares.
Según datos de un encuesta de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), divulgada por medios locales, más del 93 % de las empresas salvadoreñas no reportan ventas con el bitcóin.