Economistas destacan que las calificadoras están en espera de lo que suceda con el Presupuesto 2025 y las reformas a la CSS, como ya lo ha adelantado Moody’s.
Por La Estrella
Economistas consultados por este medio descartaron la posibilidad de que Panamá pueda tener acciones de calificación “negativas” por parte de las agencias calificadoras Moody’s y Standard & Poor’s (S&P), en los próximos dos meses, como lo prevé el Banco de inversión Barclays.
El economista Raúl Bethancourt, del Colegio de Economista de Panamá, no ve una posible pérdida del grado de inversión. “Panamá todavía tiene de donde escoger. Panamá todavía tiene para poder implementar nuevas fuentes de ingresos, pero siempre y cuando lo haga con rectitud y audacia”, comentó.
Asimismo, el economista Juan Jované, está convencido de que para quedar bien con las calificadoras de riesgos, el Gobierno, en materia fiscal, tomaría la estrategia de subejecutar las partidas presupuestarias que lograron ser aprobada en la Comisión de Presupuesto de la Asamblea Nacional, así como ir pensando en otra contención del gasto público. Todo esto, dijo, con el objetivo de enviar el mensaje de que están cumpliendo con la Ley.
“Van a comenzar a subejecutar presupuesto, como una de las muchas formas para poner líneas al presupuesto del 2025. También pueden hacer que los presupuestos de algunos ministerios se subejecuten. Al final de cuentas, en algún momento van a introducir una contención del gasto, que será la estrategia del Gobierno”, sostuvo Jované.
Mientras tanto, el economista Raúl Moreira recordó que las agencias calificadoras ya han indicado que sus análisis tendrán dos vertientes, como son el manejo fiscal y las reformas planteadas a la crisis del programa, de invalidez, vejez y muerte (IVM) de la Caja de Seguro Social (CSS), que hará la nueva administración.
“Estimo que las agencias calificadoras esperarán sobre qué pasará con la CSS para tomar su decisión en cuanto a degradar o no los créditos panameños. Sin embargo, yo diría que estamos caminando en la cuerda floja y lo que salga de la CSS es lo que va a determinar cuál va a ser el futuro económico del país en cuanto al tema del grado de inversión”, comentó Moreira.
A finales de marzo del 2024, Fitch Ratings degradó la calificación crediticia de Panamá a ‘BB+’ estable, destacando la incidencia del cierre de la mina y deuda.
Por su parte, Moody’s ya ha anunciado que se prepara para ofrecer en el último trimestre del 2024 una nueva calificación crediticia para Panamá, que podría o no afectar la que hasta ahora mantiene con Baa3, y que consolida al país como el más estable de Centroamérica.
La agencia calificadora estaría valorando su decisión con base en los anuncios que haga el gobierno con respecto a la crisis de la CSS, así como la aprobación que logren con el presupuesto general del Estado para la vigencia fiscal 2025, y que a su vez es el que establece las nuevas medidas fiscales para el quinquenio.
Las estimaciones de Barclays se dieron como parte de un informe a sus inversionistas de carácter “negativo” sobre Panamá, en el que anunció que lo rebajó a una posición de inferior, luego de que el mes pasado elevó el crédito al peso del mercado. Además, porque vieron que los bonos se vendieron el lunes entre los peores de los mercados emergentes y, por el contrario, recomendó comprar bonos de la República Dominicana en 2049 y de Surinam en 2033.
También mencionó “el panorama fiscal en deterioro, dificultades legislativas para la nueva administración y un entorno de tasas de interés más altas” justo cuando el ministro de Economía y Finanzas (MEF), Felipe Chapman, anunció un aumentó del presupuesto para 2025 en un 12,2 %, elevándose a $30.100 millones.
En ese sentido, el banco dijo que la aprobación de un “presupuesto conservador”, por parte del MEF, ha sido una “problemática”, con el gasto propuesto, aumentando a $30.100 millones.
Mencionó que Panamá ha conseguido financiamiento a través de un préstamo de $1.000 millones de JPMorgan y otros mecanismos, lo que le permite evitar la emisión de bonos en 2024, pero esto podría tener penalizaciones futuras, por una baja de calificación por ejemplo.
El reporte subraya que los bonos de Panamá se están negociando con márgenes amplios, y se espera que las acciones de calificación de Moody’s o S&P puedan afectar negativamente su valor. Barclays recomendó vender bonos Panamá 2036 al 6,875%.
Panamá emite bonos internacionales porque no imprime moneda propia y la única forma de financiar su presupuesto General del Estado, es a través de inversionistas. Para esto, tiene que ofrecer condiciones fiscales y financieras, que le permita lograr tasas de interés razonables.
Para Jované, la apreciación de Barclays es “muy volátil”, ya que no se sabe si
la caída de los bonos de Panamá se debió al resultado final que generó la última modificación del presupuesto General del Estado 2025 o es más bien una incertidumbre normal del propio mercado internacional. Sin embargo, advirtió que si el valor de los bonos bajan, entonces, subirán las tasas de interés si los inversionistas siguen viendo al país con un nivel de riesgos.
Un hecho que sí es cierto para Bethancourt es que el Gobierno no supo enviar el mensaje correcto al mercado internacional con el Presupuesto General del Estado 2025, ya que hubo muchas fallas técnicas, falta de planificación y eficiencias. “Panamá en estos momentos se encuentra en una gran encrucijada porque está aprobando un presupuesto sin cumplir las leyes y eso hacia afuera es una mala señal. Por lo tanto, necesita con urgencia ganarse un poco de credibilidad”, señaló el economista, quien recordó que otros temas que pueden afectar el costo de los bonos son la CSS y la mina.
En esta coyuntura, el ministro de Economía, Felipe Chapman, durante su sustentación en el pleno de la Asamblea, reconoció que con todo lo sucedido dentro del Presupuesto 2025 estuvieron mandando un mensaje de que “no estábamos comprendiendo la realidad del país” o “simplemente no me importa”.
“En cualquiera de las dos se mandó una mala señal, que se puede traducir en tasas de interés altas, que es lo que ha ocurrido en las últimas 48 horas”, expresó Chapman, quien confirmó que el precio de los bonos panameños ha caído y ha aumentado el costo de interés desde el 1 de julio hasta hace dos semanas.
Y, añadió que: “yo creo que eso lo podemos revertir. Si bien estamos hablando de un presupuesto que ya tiene varios motivos (negativos), aún así podemos trabajar en mandar el mensaje que eso no va a ocurrir el próximo año”.
A juicio de Moreira todo lo que se discute con el Presupuesto 2025 se debió a una mala estrategia del Gobierno, ya que buscó corregir el manejo de las finanzas públicas en un solo presupuesto, cuando pudo hacerlo de manera gradual.
“El gobierno debió ser más gradual porque tratar de resolver todo en un solo presupuesto no iba a suceder y nadie se lo iba a creer, por lo tanto se ha incurrido en lo que vemos”, concluyó.