El admitir que se está frente a esta situación y no normalizarla es básico para comenzar a poner en orden las finanzas.
Por Revista Summa
Nadie está exento a verse envuelto en algún momento de la vida en una situación de endeudamiento compleja, la cual puede darse por diversas razones. Si bien, para ejecutar proyectos personales muchas veces hay que asumir riesgos y adquirir deudas, es importante identificar cuándo se afronta un endeudamiento que se sale de las manos.
“Un endeudamiento negativo es aquel en el que se adquieren más deudas de las que se pueden pagar en un plazo razonable. Es importante tener claro qué aspectos lo pueden disparar y admitir que se encuentra en esta situación, pues muchas veces el normalizarla y creer que tenemos todo bajo control (cuando no es así) es el principal obstáculo que nos impide tener unas finanzas saludables”, explica Laura Moreno, vicepresidenta de Relaciones Corporativas de BAC.
Usted puede darse cuenta de que se encuentra en esta situación si se ve frente a situaciones como: realizar compras con crédito o con tarjetas que podría haber realizado pagando de contado; si usa el crédito para gastos básicos; si adquiere préstamos para pagar otros préstamos; cuando se piden prórrogas constantes para pagar préstamos y cuando el pago de las cuotas de las deudas supera el 40% de su ingreso mensual.
Salir de deudas. Además de admitir que se encuentra frente a una situación compleja de endeudamiento, es importante buscar asesoría de un experto para comprender cómo manejar las finanzas adecuadamente. También, puede poner en práctica los siguientes consejos:
- No gaste más de lo que gana. Es necesario tener consciencia de la situación que se afronta y no gastar como si no se tuvieran deudas.
- Si tiene varios préstamos, procure hacer al menos el pago mínimo en cada uno.
- Si no puede cumplir con lo anterior, debe tratar de pagar una parte de la deuda y ponerse en contacto con la entidad financiera para llegar a algún acuerdo.
- Si, tras hacer los pagos mínimos, le queda algo de dinero, realice recortes en otras áreas para poder comenzar a pagar un préstamo a la vez, empezando por el de menor saldo y el de la tasa de interés mayor.
- Trace un plan que le permita afrontar su situación, que se acople a sus necesidades y que pueda cumplir.
También, es importante erradicar mitos y creencias que no le permiten surgir económicamente. Por ejemplo, muchas veces se tiende a pensar que si se recibe un dinero adicional la situación compleja de endeudamiento se va a terminar. Si bien, podría resolverla a corto plazo, cuando no se tiene una adecuada gestión de las finanzas, nuevamente se podría ver envuelto en otro declive financiero, y ese dinero adicional que recibió terminará por desaparecer.
Recuerde que todos estos consejos se deben incorporar a la vida cotidiana como un hábito, ya que mes a mes deberá enfrentar los retos económicos actuales, así como aquellos que puedan surgir eventualmente. Una emergencia no puede ser evitada, pero con una adecuada planeación financiera sí se puede anticipar, estando preparado para cuando ocurra y así afrontarla de la mejor manera.