Alberto Porras, el artífice de Baker Tilly Costa Rica, una consultora imparable

Baker Tilly Costa Rica crece con una fuerza imparable, precedida por una reputación intachable y una amplia trayectoria de trabajo bien hecho.

POR Rocío Ballestero

Reúne a profesionales costarricenses competentes y altamente calificados que acumulan más de 15 años de experiencia en sus diferentes especialidades y es parte de Baker Tilly Internacional, la novena red más grande del mundo de firmas contables, legales, de auditoría, sostenibilidad y asesoría de negocios, presente en 145 territorios. Esa acertada combinación de experticia local, claridad estratégica, conocimiento y profunda comprensión del mercado con el alcance global y las mejores prácticas internacionales potencia el éxito de esta gran consultora.

Baker Tilly Costa Rica atiende a empresas en todas las industrias del país (60% de ellas con negocios internacionales en expansión) que valoran, principalmente, su capacidad de brindar soluciones integrales y de excelencia, que incluso suelen anticipar necesidades que no habían sido identificadas a lo interno de las organizaciones. Además, trabaja de forma proactiva y personalizada. Hablamos con sus cuatro líderes, quienes nos brindan pormenores sobre la evolución de su negocio y de sus nuevos planes.

Tan dinámica como el mercado actual

Alberto Porras es el socio fundador y director de la firma. Para él, ayudar a los clientes a crecer y prosperar es la prioridad número uno. Por ello, Baker Tilly Costa Rica le lleva el pulso a las demandas y cambios de su sector y ha abierto nuevas áreas de asesoría, como Administración de Nómina, Precios de Transferencia, Recursos Humanos y Sostenibilidad.

La agilidad y el acompañamiento que brinda a los clientes son otros de sus puntos fuertes, junto con la inversión constante en infraestructura, personal y capacitaciones (en el país, online y en prestigiosas universidades del extranjero).

“En esta firma los socios somos la cara ante los clientes. Asistimos a reuniones estratégicas (con frecuencia se presentan los cuatro), escuchamos sus necesidades, trabajamos de la mano con los equipos para resolver las situaciones y damos seguimiento cercano. Además, mantenemos canales directos de comunicación abiertos; ellos saben que si nos llaman por teléfono o envían un correo les vamos a contestar de inmediato.

Eso lo valoran demasiado y les demuestra que son importantes para nosotros, mientras que en otras partes todo lo tienen que ver con el profesional senior o el junior que los visita de vez en cuando. Esa diferencia radical genera confianza, algo esencial para crear relaciones duraderas, de largo plazo, que son nuestra meta”, sostiene. Dado que Costa Rica capta uno de los niveles más altos de inversión extranjera directa per cápita de América Latina, la firma está enfocada en atraer a más clientes de ese segmento de transnacionales y extranjeros interesados en establecerse o expandirse en el país. Ese proceso se ve favorecido por las capacidades ampliadas y su alcance global, a raíz de su vinculación con Baker Tilly. Por ejemplo, en el último año, ha participado en cerca de 10 procesos de fusiones y adquisiciones, vinculadas a los sectores de tecnología, servicios, banca y proyectos inmobiliarios.

“Hacemos desde la valoración del negocio y el due dilligence hasta cierre de la transacción. Ahora tenemos un cliente bancario interesado en colocar en el país US$200 millones, a través de un fondo de inversión respaldado en participaciones accionarias en pymes que generen rendimientos importantes. Estamos trabajando en la identificación y revisión de las empresas que lo integrarán”, comenta el socio director. Añade que estar bajo la estructura de Baker Tilly ha marcado un antes y un después: “Estamos creciendo mucho y de forma acelerada”.

Expandirse, sin perder su esencia

Eduardo Sandí, socio especialista en Auditoría, hace énfasis en un cambio del mercado que juega a su favor. “Hace 20 años, las multinacionales solo trabajaban con alguna de las Big 4 (las cuatro principales consultoras internacionales) por exigencia de las casas matrices que creían que eran buenas per sé. Ahora tienen más libertad para escoger al auditor local ante un descontento generalizado por la falta de agilidad de esas grandes firmas, escándalos que las salpican y transformaciones muy rápidas en el contexto del país. Eso hace que los que pueden opten de inmediato por nuestra firma, ya que han identificado que pueden obtener un servicio de excelencia en todas las áreas que requieren, con los estándares que requieren”.

Y continúa: “Tratamos de potenciar como elemento diferenciador un servicio ágil para nuestros clientes. Nosotros damos respuestas expeditas, información útil al momento e implementamos soluciones hasta en un día o dos, en vez de meses.

Esto cumpliendo con todas las normas y sin brincarnos ningún procedimiento, apoyados en metodologías y tecnologías innovadoras y sometidos a revisiones muy estrictas.

¡Los clientes no pueden esperar para tomar decisiones importantes!”. Para él, Baker Tilly también prospera porque, siendo una firma de servicios completos de alcance global, opera con el concepto de firma boutique, dando un servicio muy personalizado a los clientes y soluciones integrales para que no tengan que recurrir a ningún otro profesional. “Por otra parte, hay lectores de estados financieros dentro del juego que ahora exigen más. Un banco, por ejemplo, se convierte prácticamente en socio de la empresa cuando le da un préstamo. Han reformulado su conocimiento en la parte de normas, demandan mayor y mejor información de sus clientes e incluso les indican quién los puede auditar y quién no, en aras de la transparencia y la confianza. Cuando les presentan nuestro perfil siempre lo aceptan porque conocen la calidad de nuestro trabajo, lo mismo que las autoridades reguladoras”, añade.

Visión (y acción) interdisciplina- ria
Edwin Bogantes, socio especia- lista en el área Legal, hace énfasis en cómo el abordaje integral que distingue a la compañía abre otras líneas de acción. “Como nos hemos enfocado mucho en las necesidades del extranjero en Costa Rica, des- de que llegan los guiamos en la apertura de sociedades, empresas y cuentas bancarias; en los trámites migratorios, de patentes e inscripción de marcas y en reclutamiento y gestión de personal. Eso nos ha llevado a contar con todo un departamento de propiedad intelectual y a fortalecer los servicios en bienes raíces, fiduciarios y administración de nómina, entre otros, junto con los de contabilidad y aseso- ría para el cumplimiento fiscal. Después de la reforma fiscal de 2018, hay muchas regulaciones nuevas e incentivos a los que muchos contribuyentes no acce- den por mera desinformación”, asegura.

En la parte laboral priva un enfoque de prevención, por lo que cuentan con másteres en redacción y revisión de contratos e indican hasta cómo redactar una carta de amonestación adecuadamente. En bienes raíces, campo en franca expansión, su experiencia también es fuerte. “En lo personal, he constituido más de 5.000 fincas filiales en el país, pero no solo apoyamos a los clientes en la identificación, compra y registro de propiedades, sino que los ayudamos incluso a tramitar la residencia, si lo requieren”, comenta.

Otra ventaja es que a los que tienen operaciones regionales o internacionales no solo lo refiriere a las oficinas de Baker Tilly en los otros países, sino que les brinda acompañamiento y tiene relación directa con sus pares para llevarle el pulso a los tiempos de respuesta y las soluciones implementadas ya que se siente responsables de esos clientes.

“Las filiales de transnacionales siguen los estándares y directrices de la casa matriz por lo que nosotros respondemos de esa misma forma, hablándoles en un mismo idioma, sin importar la ubicación, ya que si bien somos firmas independientes también nos abriga una misma marca”, destaca.

Abierta y adaptada al cambio Carlos Gómez, socio especialista en el área de Impuestos, expone cómo la tecnología, la modernización de los sistemas y la globalización obliga a las empresas a tomar medidas para no quedar- se obsoletas, aprovechar oportunidades y evitar sanciones por incumplimientos.

“Cada vez son más las empresas locales que hacen negocios internacionales y han dejado atrás la mentalidad de hacer todo en casa. Conforme crecen y salen nuevas actualizaciones legales, tributarias y laborales se dan cuenta que a sus contadores y abogados les falta bagaje y que requieren de servicios más sofisticados que nosotros podemos proporcionar como un aliado externo experto. Aparte, que las autoridades nacionales les hagan una auditoría ya no es una lotería sino una práctica frecuente porque tienen más facultades y herramientas modernas para acceder a información y cruzar datos”, considera.

Brinda otras razones para considerar su oferta: “Los cambios en nuestras materias no cesan. Hasta hace poco se estableció el registro de beneficiarios finales y la obligación de presentar la declaración de impuestos de sociedades inactivas, por ejemplo; nosotros vamos al día con todo eso e incluso nos adelantamos en temas aún no regulados, como la economía digital. Somos una firma altamente especializada en donde valoramos muchísimo la capacidad técnica de nuestros colaboradores por lo que están en constante capacitación. Eso nos permite ofrecer un servicio de la mejor calidad posible, así como mantenernos al día con las necesidades del mercado. Un ejemplo de ello es la especialización que acaban de terminar dos de nuestros abogados sobre los aspectos jurídicos de los smart contracts y blockchain en la Universidad de Salamanca, España”. Adicionalmente, la cultura de Baker Tilly Costa Rica fomenta las sinergias entre sus clientes: “Si tenemos una compañía que cultiva piña y otra que vende agroquímicos las ponemos en contacto y tratamos de abrirle los ojos a los productores locales sobre opciones en el exterior, aprovechando nuestra red de contactos. Así logran proyectarse diferente y crecer haciendo un mejor uso de sus recursos”.

Sostenibilidad: la nueva línea de negocios

Es una tendencia en boom que Baker Tilly respalda a lo interno y a lo externo. Trabaja en reducir de forma significativa sus impactos ambientales, con la meta de convertirse en la primera consultora en Costa Rica en certificarse carbono neutral y en la Norma Internacional de Sostenibilidad y Clima (solo cuatro de sus pares globales la tienen en el mundo). En paralelo, los especialistas de la firma se mantienen al día con lo último del campo para guiar a los clientes.

“Tenemos que ser un ejemplo para que nuestros clientes se sumen a estos esfuerzos. Además, a partir del 1o de enero del 2024 regirán normativas para que las empresas cumplan con parámetros de sostenibilidad financiera y cambio climático (NIIF S1 y NIIF S2), pero no hay que esperar hasta entonces para implementar cambios. Hay que empezar ya, el mercado lo demanda”, alerta Porras.

Destaca que ser sostenible no es un tema de sembrar árboles, sino de operar con real eficiencia, bajo el enfoque del triple beneficio: ambiente, social y económico. Requiere abordar el tema de gobernanza y acciones para mejorar el entorno laboral, retener el talento y evaluar riesgos, junto con medidas de compensación y para hacer mejor uso de los recursos.

La fuerza de Baker Tilly International

• US$4.066 millones en ingresos registró al cierre de 2022 (+13%), una cifra récord.
• +41.000 colaboradores
• 703 oficinas, en 145 territorios
• 5a mejor firma consultora de América Latina y 9a en el mundo.
• +18% creció en 2022 en América Latina, territorio donde se registra la mayor expansión de la firma.