En el CFIA solo el 23,82% del total de profesionales registrados son mujeres.

Por Revista Summa

A lo largo de la historia, las mujeres han enfrentado diversas luchas en términos de género, incluido el acceso igualitario a la educación y oportunidades profesionales. Sin embargo, hoy más que nunca, la mujer está tomando terreno y empoderándose para estudiar alguna ingeniería, a pesar de las barreras que aún persisten.

¿Cuáles son sus mayores luchas?

Brecha de género: Existe una brecha de género significativa en el campo de la ingeniería, con menos mujeres representadas en comparación con los hombres.   De hecho, actualmente el Colegio de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) cuenta con un registro de tan solo 8,668 ingenieras inscritas, lo que representa un 23,82% del total de profesionales registrados en el colegio, en comparación con los 27,720 hombres (76.18%). ^[i]

“Si bien estas cifras muestran que hay camino por recorrer para lograr una mayor paridad de género, desde Fidélitas estamos comprometidos desde hace años en promover y respaldar la participación de más mujeres en la ingeniería, por lo que trabajamos arduamente en nuestra universidad para eliminar las barreras que aún persisten en la sociedad, comentó Melania Solano, decana de la Facultad de Ingenierías de Universidad Fidélitas.

De hecho, en el 2018 implantamos la Beca Ing. Sandra Cauffman, ingeniería de la NASA que ha sido un referente para nuestras estudiantes y cuyo objetivo es estimular que más mujeres opten por alguna ingeniería.

Estereotipos y prejuicios: Las mujeres a menudo se enfrentan a estereotipos arraigados que sugieren que la ingeniería es un campo más adecuado para los hombres. Los prejuicios de género incluso han subestimado las habilidades y capacidades de las mujeres ingenieras, dificultando su avance profesional, agregó Solano. ^[ii]

Lo anterior se ve reflejado en la Radiografía Laboral realizada por CONARE, donde en carreras como Ingeniería en Mantenimiento Industrial solo hay un 7% de mujeres graduadas contra un 93% de varones, en Ingeniería Mecatrónica, solo el 13%, en Ingeniería Electrónica solo el 14,4% y en Ingeniería Eléctrica solo el 19,7%.

Cultura laboral y ambiente de trabajo: En algunos entornos de ingeniería, puede prevalecer una cultura laboral dominada por hombres, lo que puede crear barreras para la inclusión y la participación plena de las mujeres. La falta de apoyo y la discriminación en el lugar de trabajo pueden afectar negativamente la retención de ingenieras.

Conciliación de la vida laboral y personal: Este es un tema especialmente desafiante para las mujeres, debido a la carga de trabajo que suele llevar en el hogar, lo cual interfiere muchas veces con sus planes profesionales.

Falta de representación en roles de liderazgo:  Esto puede limitar las oportunidades de progreso y la influencia en la dirección de la profesión.  En Fidélitas respaldamos y promovemos el liderazgo femenino en las diferentes áreas, carreras y departamentos.  Contamos con una mujer presidiendo la U, una rectora, varias decanas, directoras y subdirectoras de carrera compartiendo sus habilidades y competencias con sus pares masculinos, lo cual enriquece el quehacer de la U.

Es importante destacar el aporte que hacen las ingenieras a la innovación, el desarrollo sostenible y la resolución de problemas complejos. Sus habilidades técnicas, creativas y de liderazgo han demostrado ser fundamentales para el progreso de nuestra sociedad, acotó la decana de Ingenierías.

La ingeniería es un campo en constante evolución y crecimiento, y se beneficia enormemente de la diversidad y la inclusión de género. Las habilidades y perspectivas únicas que aportan las mujeres ingenieras se complementan de manera armónica con los aportes de sus colegas hombres. Juntos, hombres y mujeres, fortalecen y enriquecen la profesión, impulsando el desarrollo y la innovación en todos los sectores de la sociedad.

En Fidélitas reiteramos nuestro compromiso de promover la igualdad de oportunidades. Celebramos los avances logrados y nos comprometemos a seguir trabajando juntos para crear un entorno diverso, equitativo e inclusivo para todas las personas que deseen dedicarse,  reiteró Melania Solano.