Ante inclusión de Costa Rica en lista de países no cooperantes en Unión Europea
Por Revista Summa
Para la Asociación de Empresas de Zonas Francas de Costa Rica (AZOFRAS) la estabilidad económica y social y la seguridad jurídica resultan esenciales para la llegada de la inversión extranjera directa y el desarrollo del país.
Por eso la decisión de la Unión Europea (UE) de incluir a Costa Rica en la lista de países no cooperantes en materia fiscal, causa preocupación al sector de zonas francas, máxime si se toman en cuenta los riegos que implicaría incluir en este proceso, un régimen agresivo de gravamen de rentas extra territoriales, y el impacto que podría causarse en la imagen país y atracción de inversión.
Los representantes del sector de zonas francas aseguran que las inconsistencias que se han estado brindando con respecto al alcance de las reformas que la UE solicita a Costa Rica con respecto a su sistema tributario, ponen en riesgo la atracción de inversión extranjera directa, promueve la fuga de capitales y afecta la reactivación económica que tanto requiere el país Carlos Wong, presidente ejecutivo de AZOFRAS aseguró que este tipo de imprecisiones crean inseguridad jurídica para las 600 empresas inscritas en el régimen, y que generan más de 185 mil empleos formales e inclusivos, así como la atracción de nuevas inversiones.
“Las empresas vienen a Costa Rica por su estabilidad y seguridad jurídica. De la seguridad jurídica depende nuestra capacidad para atraer inversiones generadoras de empleo y desarrollo, como las que logró atraer el país durante el 2022, con 101 proyectos de inversión extranjera que generaron 22 mil nuevos empleos”, señaló Wong.
El representante de AZOFRAS asegura que la situación actual con la UE, podría desincentivar a las
empresas con actividad legítima de invertir en un país. Además, se afecta la imagen internacional al enviar un mensaje de desconfianza e inestabilidad.
“La inestabilidad y el cambio en las reglas del juego ahuyenta la inversión de las empresas. Países que han cambiado las reglas en el pasado han perdido miles de puestos de trabajo y cientos de empresas han buscado nuevos destinos para sus operaciones”.
AZOFRAS asegura que la UE pide un esquema de renta territorial ampliada o reforzada, bajo el cual se podría incluir un gravamen sobre las rentas empresariales pasivas del exterior. La UE no está exigiendo que Costa Rica adopte un sistema tributario sobre renta mundial, sino un sistema tributario alineado a su visión bajo su Código de Conducta.
En el sector de zonas francas se considera que el sistema de renta territorial de Costa Rica es un modelo apropiado para economías emergentes que son importadoras netas de capital y requieren incentivar la inversión internacional y doméstica.
Para Wong, la situación actual con la UE no debe ser utilizada de excusa para incluir reformas e incrementos en las cargas tributarias, que ya son bastante elevadas en Costa Rica”.
“Estas inconsistencias generan inseguridad jurídica y un mensaje negativo para los inversionistas”, dijo Wong, quien lamenta que tanto AZOFRAS, como el sector productivo empresarial, no fue consultado ni tuvo conocimiento de las acciones y compromisos adquiridos por el gobierno anterior con la UE.
Tampoco fue informado de ninguna acción durante la presente administración.
AZOFRAS se pone a disposición del Gobierno, como lo han hecho en administraciones anteriores, para que de forma conjunta con el sector productivo empresarial, se busque la solución adecuada y pronta que permita a Costa Rica ser excluida de la lista de la UE.
“Debemos buscar las soluciones que garanticen la dinamización de la economía, el crecimiento del empleo, y la generación de más oportunidades para quienes pretenden laborar en el sector de zonas francas”, expresó Wong.