Entre ambos proyectos el Gobierno del Presidente Bukele está realizando una inversión de $500 millones.
Por Revista Summa
La modernización de la infraestructura vial es uno de los compromisos del Gobierno del Presidente Nayib Bukele, pues gracias a las inversiones que se realizan en esta materia se abren nuevos empleos, se genera más turismo, se garantizan caminos seguros y se dinamiza la economía.
El ministro de Obras Públicas, Romeo Rodríguez, aseguró que en este momento se encuentran en licitación dos megaproyectos en el departamento de La Libertad, una de ellas es la ampliación de la carretera Litoral y la otra en la Panamericana en el sector de Los Chorros.
“En este momento tenemos en licitación dos megaobras de infraestructura vial para poder mejorar la logística, el comercio y para mejorar el turismo en los diferentes sectores”, detalló el funcionario en una conferencia de prensa.
Según Rodríguez, el proyecto de la carretera Litoral consta de 23 kilómetros, los cuales se han dividido en tres tramos; el primero de ellos cuenta con son 6.24 kilómetros que es el que se encuentra en licitación pública. Se espera que el próximo año se lance la licitación de los tramos restantes.
“Todo el proyecto consta con una inversión de US$203 millones. Son 22.73 kilómetros los que se van a ampliar”, detalló el funcionario, quien explicó que pasarán de dos a cuatro carriles. Este proyecto incluye la intervención de más de 14 puentes, la construcción de miradores, espacio para estacionamiento, entre otros.
Asimismo, se encuentra en licitación la ampliación de la carretera desde Las Delicias hasta el desvío a San Juan Opico, en donde son 15 kilómetros que serán ampliados; además de la construcción de viaducto Francisco Morazán.
“Hemos lanzado una sola licitación para todo el proyecto, es decir, vamos a tener una sola empresa constructora y una sola empresa supervisora para poder realizar la obra”, explicó el titular de Obras Públicas.
De acuerdo con el funcionario, entre ambos proyectos el Gobierno del Presidente Bukele está realizando una inversión de $500 millones, generando miles de empleos directos e indirectos a través de los procesos de construcción y a la vez dinamizando la economía con la reducción de costos del traslado de las mercancías, lo que beneficia el bolsillo de las familias salvadoreñas.