Las medidas de la CorteIDH fueron ordenadas en el marco de la supervisión de cumplimiento en el caso Vélez Loor sobre detención migratoria, por el cual el Estado panameño fue condenado por tratos crueles e inhumanos.
Por EFE
Panamá informó este lunes que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) levantó las medidas ordenadas al país en mayo de 2020 para garantizar los derechos a la salud y la vida de miles de migrantes en tránsito hacia Norteamérica y ubicados temporalmente en estaciones migratorias en sus fronteras.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Panamá informó este lunes en un comunicado que la CorteIDH «levantó las medidas provisionales impuestas» al país y «archivó el expediente referido al caso Vélez Loor vs Panamá», en el marco del cual se dictaron las disposiciones.
En mayo de 2020 y en medio de un creciente flujo de migrantes irregulares hacia EE.UU., la Corte Interamericana dictó una resolución en la que pedía a Panamá reducir el hacinamiento en las estaciones de recepción migratoria (ERM) situadas en las fronteras con Colombia (Darién) y Costa Rica, a las que son conducidos los miles de migrantes que ingresan al país en su tránsito irregular hacia el norte.
La CorteIDH también pidió a Panamá establecer protocolos de prevención de contagio de la covid-19 y brindar a los migrantes acceso gratuito a los servicios de salud, incluidos los que necesitan las mujeres embarazadas, entre otros.
La decisión del tribunal continental se da como resultado del compromiso de Panamá como Estado «garante y promotor» de los derechos humanos y «respetuoso» de la labor de las instituciones del Sistema para «fortalecer la cultura de cumplimiento de las normas tutelares de la Convención Interamericana de Derechos Humanos», señaló la cartera panameña de Exteriores.
La Cancillería de Panamá aseguró que en su resolución la CorteIDH señaló que fue de «vital importancia» que el Gobierno de Panamá «colaborara para que se efectuara la visita en terreno a Darién y la audiencia desarrollada en Panamá el 17 y 18 de marzo de 2022 relacionadas con la implementación de las medidas provisionales en su territorio».
Con la visita al terreno «el país demostró lo reportado en nuestros informes, en el sentido de que el Estado se mantiene trabajando incesantemente en brindar una atención integral a esta población migrante, no solo por las medidas provisionales impuestas sino por su propia convicción humanista», dijo la Cancillería.
«Esta resolución respalda nuestra buena voluntad y transparencia hacia las recomendaciones de la CorteIDH, que ha entendido nuestra preocupación genuina para atender el complejo fenómeno de la migración irregular con enfoque humanitario, por lo que abogamos a nivel continental y de forma colaborativa», afirmó la canciller de Panamá, Erika Mouynes, en el comunicado.
Las medidas de la CorteIDH fueron ordenadas en el marco de la supervisión de cumplimiento en el caso Vélez Loor sobre detención migratoria, por el cual el Estado panameño fue condenado por tratos crueles e inhumanos.
El ecuatoriano Jesús Vélez Loor fue detenido en noviembre de 2002 en Panamá por orden de autoridades de migración del país, que le acusaron primero de vinculación con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y luego de ser peligroso para el orden y la seguridad pública panameña.
Vélez Loor fue liberado en 2003. En agosto de 2010, la Corte escuchó el testimonio del ecuatoriano y, cuatro meses después, falló a su favor condenando a Panamá por tratos crueles e inhumanos.
La sentencia obligó a Panamá a indemnizar con 59.000 dólares a Vélez por sufrir torturas, pagados en su totalidad, según aseguró el ecuatoriano, quien resaltó que además el Gobierno panameño ha cumplido con otros puntos de la sentencia, como derogar el decretó ley que condenaba a los migrantes y por el que fue detenido.