Las expectativas de demanda se mantienen «estables» frente a los temores por el repunte en las infecciones por la pandemia de la covid-19, señaló la entidad.
Por EFE
Honduras pagó US$886,5 millones en los primeros siete meses del año por concepto de importaciones de combustibles, un 63,6 % más que en el mismo período de 2020, y compró 1,1 millones de barriles más de hidrocarburos, informó este jueves el Banco Central (BCH).
Entre enero y julio la compra de combustibles, lubricantes y búnker para generación de energía eléctrica en Honduras aumentó 344,6 millones de dólares con relación al mismo periodo del año pasado (541,9 millones de dólares), indicó el Banco Central en un informe.
El incremento en la factura petrolera en los siete meses obedece al alza en el precio del petróleo, lo cual fue influenciado por la reactivación en las economías del resto del mundo y la disminución en las reservas de crudo de Estados Unidos por la temporada de verano, añadió.
Las expectativas de demanda se mantienen «estables» frente a los temores por el repunte en las infecciones por la pandemia de la covid-19, señaló la entidad.
Los hondureños pagaron 305,9 millones de dólares por la compra de diésel, lo que supone un 53,6 % más que en los primeros siete meses de 2020, cuando compraron 199,2 millones de dólares, detalló.
Agregó que la compra de gasolina superior le costó a Honduras 215,5 millones de dólares, un 103,5 % superior a los 105,9 millones pagados en el mismo periodo de 2020.
El país centroamericano pagó 119,7 millones de dólares por la importación de gasolina regular, lo que representa un 78,1 % más a los 67,2 comprados en los primeros siete meses del año pasado, precisó el BCH.
La importación de búnker, principal materia prima para la generación de energía térmica, por 155,7 millones de dólares, aumentó 29,4 % con relación al mismo lapso de 2020, cuando ascendió a 120,3 millones de dólares.
También señaló que se compraron 84,5 millones de dólares en queroseno y gas licuado para uso doméstico.
En los primeros siete meses de 2021 se importaron 12,1 millones de barriles de derivados del petróleo, lo que representa 1,1 millones de barriles más a lo comprado en el mismo periodo de 2020, cuando sumaron 11 millones de barriles, según el informe del Banco Central.
El organismo incluyó en la factura petrolera de entre enero y julio la compra de energía eléctrica que Honduras hizo a otros países centroamericanos, que no identifica, por 11,78 millones de dólares, 14,6 % menos a los 13,82 millones comprados en los primeros siete meses del año pasado.