Las remesas de 2019 representaron casi la misma cantidad de dinero que ingresó a Guatemala por sus exportaciones.
Por EFE
El ingreso de divisas por remesas familiares enviadas a Guatemala en noviembre registró, por sexto mes consecutivo, un alza con respecto al mismo período de 2019, según indicó este lunes el Banco de Guatemala (central).
La cifra total en dichos once meses es de 10.076 millones de dólares y equivale a un 5,3 por ciento más que lo recibido por el país en 2019, cuando fueron enviados 9.567 millones de dólares, según la entidad bancaria estatal.
Desde el pasado mes de junio, el país centroamericano ha contabilizado un mayor ingreso de remesas de migrantes en el extranjero que los reportados en la misma temporalidad en 2019, además de reportar máximos históricos interanuales.
Según el Banco de Guatemala, en noviembre ingresaron al país US$983 millones en concepto de remesas, US$163 millones más que en el undécimo mes del año pasado.
En octubre, el Banco de Guatemala identificó el máximo envío de remesas de guatemaltecos a su país de origen en la historia, con 1.132 millones de dólares en total.
Las remesas de 2019 representaron casi la misma cantidad de dinero que ingresó a Guatemala por sus exportaciones, con base en estadísticas oficiales.
Las cifras apuntan a que Guatemala culminará con un nuevo récord de remesas anual, superando los 10.500 millones de dólares remitidos en 2019 y que significaron el 13,8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
De acuerdo a diversos informes, el dinero enviado desde el exterior sirve para la supervivencia de alrededor de seis millones de personas de las 16 millones que habitan del país.
El Banco central estimó al principio de la crisis derivada de la covid-19 que el PIB caería un 2,5 por ciento al cierre de 2020, pero en su segunda revisión estimada del crecimiento, en octubre pasado, aseguró que la caída sería del 1,5 por ciento, menor a la esperada en junio.
En Guatemala, uno de cada dos niños sufren de desnutrición y el 59 por ciento de la población vive bajo el umbral de la pobreza.
La mayoría de las remesas familiares proceden de Estados Unidos, donde radican casi tres millones de guatemaltecos, la mayoría de manera ilegal.