La recuperación de las remesas dependerá de las medidas de apoyo a los ingresos en Estados Unidos y de la situación legal y niveles de educación de las diásporas migrantes.
Por Revista Summa
Alrededor de 75% de las remesas que llegan a América Latina y el Caribe (ALC) provienen de Estados Unidos, país que pasa por su peor recesión desde la Gran Depresión. La recesión provocada por la pandemia está teniendo un impacto negativo y desproporcionado en el mercado de mano de obra latina en Estados Unidos, el cual es mitad nacido en el extranjero y se encuentra altamente concentrado en el sector de servicios. En un nuevo reporte, Moody’s Investors Service analiza el impacto un menor nivel de remesas en el crecimiento económico y las cuentas externas en ALC, así como en las perspectivas de recuperación de las remesas hacia la región.
Aunque los beneficios extraordinarios por desempleo otorgados por el gobierno de Estados Unidos han ayudado parcialmente a mantener el nivel de ingreso, Moody’s estima que las remesas totales a ALC disminuirán alrededor de 4% este año – con experiencias muy diferentes en cada país – al tener que enfrentar latinos y caribeños mayores niveles de desempleo.
“Dentro de ALC, Centro América y el Caribe son los más vulnerables económicamente a la disminución en los flujos de remesas,” señala Gabriel Agostini, un Associate Analyst de Moody’s. “México es el receptor más importante de la región con casi USD$40,000 millones en remesas recibidas el año pasado. Sin embargo, aun cuando los flujos de remesas a Centro América y el Caribe son menores en terminos nominales, en términos relativos son sustancialmente mayores representando casi 10% del PIB en dichas regiones,” continuó Agostini.
Después de alcanzar 19.3% en abril, muy por arriba del promedio nacional de 14.7%, el desempleo latino se mantendrá sostenidamente alto. Este mayor nivel de desempleo limita las perspectivas de mejora para los flujos de remesas en el futuro próximo, las cuales dependen del crecimiento económico de Estados Unidos y de las medidas de apoyo al ingreso que jugaron un papel primordial en la sustitución de ingresos perdidos este año. Adicionalmente, la autorización legal de los inmigrantes ALC en Estados Unidos y su nivel de educación también influirán en la velocidad con la que se recuperen las remesas.
Si el gobierno de Estados Unidos otorga nuevamente beneficios por desempleo, o si el desarrollo de una vacuna efectiva contra el coronavirus permite una recuperación económica más rápida de
Estados Unidos, entonces esperaríamos que las remesas regresen a niveles los pre pandemia más rápidamente.
El reporte también cuantifica el impacto en las remesas bajo un escenario alternativo que contempla una pandemia prolongada y un retraso en las medidas de apoyo a los ingresos por parte del
gobierno de Estados unidos. En este escenario más negativo, las remesas de Estados Unidos a los países ALC podrían caer 10% en relación al año anterior.