Demanda crear una fuerte alianza con los gobiernos y la sociedad para reactivar las economías de los países y avanzar hacia la seguridad alimentaria.
Por Revista Summa
El sector agroalimentario de América Latina demanda una renovada visión por la crisis generada por la pandemia del COVID-19 y el rol del sector privado es estratégico para detonar la reactivación de las economías de los países, coincidieron en señalar especialistas participantes del Foro virtual Hemisférico Agroempresarial, organizado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).
Funcionarios, empresarios y productores participantes mencionaron el rol y acciones a seguir por el sector agroalimentario, para coadyuvar a atender las necesidades asociadas a la pandemia con una renovada visión del multilateralismo, de políticas públicas y de nuevas visiones de productividad y sostenibilidad, para detonar el desarrollo de las naciones.
En un ejercicio previo al foro, se presentó el resultado de una encuesta realizada entre empresarios de 27 países de América Latina y el Caribe, quienes consideraron que el nuevo rol del sector privado debe orientarse a mejorar la innovación, el comercio, las alianzas estratégicas y la integración de las cadenas de valor, así como a diversificar mercados y priorizar la salud del trabajador.
El Director General del IICA, Manuel Otero, destacó en su mensaje de bienvenida al foro que la crisis sanitaria por el coronavirus coloca al sector agroalimentario en una posición estratégica para la reactivación de la economía y es una nueva la oportunidad para construir nuevas visiones de desarrollo.]
Miguel García Winder, Subsecretario de Agricultura de México, indicó que la pandemia por el COVID-19 evidenció debilidades de los sistemas agrícolas del hemisferio, pero al mismo tiempo dio la oportunidad de repensar los roles y las acciones que se desarrollan en el sector público y privado.
Entre estas oportunidades está la posibilidad de reestructurar los sistemas alimentarios para que se enfoquen a lograr el bienestar de la sociedad, y para que el sector agroempresarial redefina sus esquemas operativos y la prestación de servicios a los consumidores, señaló al participar en representación del Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de México, Víctor Villalobos.
“Se tiene la responsabilidad de mantener el flujo comercial abierto y de fortalecer las instituciones gubernamentales que aportan en temas de investigación, innovación y educación para adelantarse a los requerimientos futuros”, indicó.
Roberto Rodrigues, exministro de Agricultura de Brasil, destacó la necesidad de crear una fuerte alianza de los sectores públicos y privados para mejorar la producción y el abasto de alimentos, y de fomentar un acercamiento con los parlamentos de América Latina para cambiar leyes en favor del sector agroalimentario.
Destacó que la digitalización, la conectividad y la automatización se incorporarán al trabajo en el campo y será necesario capacitar y calificar a los técnicos que ayudan a los pequeños agricultores, especialmente a los miembros de las cooperativas, en esta etapa post COVID-19.
“Será esencial que los productores y los gobiernos nacionales actúen de manera integrada para evitar la injusticia o la discriminación, especialmente por parte de los países ricos contra los países exportadores, y hacer un esfuerzo negociado entre los diferentes gobiernos para que las posibles normas proteccionistas no causen desastres para los productores rurales, especialmente los pequeños”, dijo.
Susana Yturry, gerente de Agroexportaciones de la Asociación de Exportadores (ADEX); Xinia Chávez, Directora Ejecutiva del Instituto del Café de Costa Rica (ICAFÉ); Daniel Pellegrina, Vicepresidente de la Federación de Asociaciones Rurales del Mercosur (FARM) y Vassel Stewart, Presidente de la Asociación de Agronegocios del Caribe, destacaron que la pandemia abrió una ventana de oportunidades para mejorar la producción, diversificar mercados y mejorar el uso de las tecnologías.
Consideraron la necesidad de construir un sector preparado, competitivo, innovador, con fuertes alianzas públicas y privadas para enfrentar una crisis sanitaria, económica, social y ambiental sin precedentes, que los gobiernos tendrán que resolver con la activa y oportuna acción del sector privado agropecuario y de la sociedad civil organizada, pues la pandemia ha puesto en evidencia la fragilidad de las economías y la necesidad de repensar las agendas agroalimentarias y energéticas del futuro.
Bosco de la Vega, Presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) de México, habló del nuevo rol del sector para ayudar a construir una agenda renovada que mejore el flujo comercial de productos agropecuarios y de entender la importancia de la inocuidad y sanidad de los alimentos, así como de la trazabilidad.
Es un reto, dijo, acercar nuevas tecnologías a los pequeños productores y contar con políticas públicas orientadas a una nueva realidad para que el sector agroalimentario sea vital para el desarrollo de las naciones, indicó durante el foro virtual en el que participaron más de 300 personas de ALC.
Durante el evento se transmitió un video del Secretario de Agricultura y Desarrollo Rural de México, Víctor Villalobos, en el que exhortó a todos los sectores a realizar un trabajo coordinado para orientar la generación de nuevas políticas para el sector agroalimentario de México y el resto de América Latina, derivado de la pandemia del COVID-19 .