iniciar el año con orden, distribuir bien el aguinaldo y realizar compras seguras en línea.
Por Revista Summa
Con el cierre del año, especialistas financieros coinciden en que la estabilidad económica no depende solo del nivel de ingresos, sino de la manera en que se administran los recursos disponibles. La falta de planificación previa es, nuevamente, uno de los principales errores que provoca que muchas familias inicien enero con estrés, deudas o compromisos desordenados.
Antes de que finalice el año, es fundamental revisar gastos, definir prioridades y organizar el uso del dinero para iniciar el 2026 con claridad y sin sobresaltos. La planificación temprana permite evitar presiones innecesarias y construir hábitos financieros más saludables.
Sujeyny Gamboa, Jefe de Relaciones Corporativas de Coopecaja explica que el orden financiero surge de decisiones simples que se toman antes de que llegue enero. “Cuando los gastos de fin de año se enfrentan sin un plan, es muy fácil perder el control. Pero si organizamos el presupuesto, distribuimos el aguinaldo estratégicamente y definimos metas de ahorro, logramos un inicio más estable y con menos preocupación”, señaló.
Los pasos para iniciar el año con estabilidad
Gamboa indicó que hay cuatro acciones concretas que pueden mejorar el bienestar financiero desde el primer mes del año:
1. Optimice su presupuesto: Después de la temporada festiva, muchas personas enfrentan la llamada “cuesta de enero”. Revisar los gastos, ajustar consumos y priorizar compromisos ayuda a que este inicio sea más llevadero y sin sobresaltos económicos.
2. Ahorre de forma automática: El inicio de año es un excelente momento para establecer nuevos propósitos financieros. Los planes de ahorro automático permiten crear disciplina, proteger a los hogares ante imprevistos y avanzar de manera gradual hacia metas de mediano plazo.
3. Reduzca sus deudas con estrategia: Se recomienda enfocarse en pagos planificados y considerar la renegociación de tasas elevadas. También puede ser útil valorar opciones como la refundición de deudas para simplificar obligaciones y liberar recursos mensuales.
4. Desarrollar nuevas fuentes de ingreso: Diversificar los ingresos puede ayudar a aliviar la presión financiera mensual. Actividades complementarias, pequeños emprendimientos o monetizar habilidades personales pueden convertirse en un apoyo importante para equilibrar el presupuesto familiar.
El uso inteligente del aguinaldo marca la diferencia
El aguinaldo no es un ingreso “extra”, sino el resultado de un año completo de trabajo. Su buena administración es clave para iniciar el 2026 con orden. Entre las recomendaciones están:
• Distribuir el aguinaldo estratégicamente: 70% para responsabilidades, 20% para objetivos concretos y 10% para disfrute responsable.
• No destinar más de un 15% a regalos, para evitar gastos impulsivos.
• Aprovechar entre un 20% y un 30% del aguinaldo para iniciar o fortalecer un fondo de emergencia.
Compras seguras y ciberseguridad para proteger el bolsillo.
Para quienes prefieren las compras en línea, las prácticas de ciberseguridad también forman parte del bienestar financiero. Algunas recomendaciones clave son; usar sitios seguros, uso de tarjetas virtuales o plataformas reconocidas de pago, evitar hacer transacciones en redes públicas y no guardar ni ingresas tarjetas en sitios no confiables, además de mantener contraseñas seguras y distintas para cada sitio donde se guarde información de tarjetas de crédito o débito.
Coopecaja recalca que pequeños ajustes, aplicados de manera constante, pueden transformar la organización financiera de las familias. Planificar el presupuesto, proteger las compras digitales y distribuir adecuadamente los ingresos permite construir un 2026 más estable y sin presiones innecesarias.
“La verdadera inteligencia financiera está en dar sentido a cada decisión. Las buenas prácticas que se adopten ahora serán la base de un año más ordenado”, concluyó Gamboa.