La UE ingresa cada año unos 140.000 millones de euros menos de lo que debería en IVA debido al fraude, la evasión fiscal o errores de cálculo.
Por EFE
Las nuevas normas del IVA para el comercio electrónico en la Unión Europea permitirán hacer en un solo país los trámites del impuesto por las ventas en todo el territorio comunitario, ahorrando 2.300 millones de euros a las empresas, y eliminarán la exención de IVA en compras de bajo valor a terceros países, lo que debería elevar la recaudación en al menos 7.000 millones más.
Son los cálculos que maneja la Comisión Europea sobre unas reglas que entrarán en vigor mañana y actualizarán una legislación que databa de 1993 y no había seguido el ritmo de la explosión del comercio a través de Internet en los últimos años.
Según Eurostat, el número de empresas comunitarias que vendieron en línea pasó del 15 % en 2010 al 21 % en 2019 y los ingresos generados por este vía crecieron del 13 % al 20 % en ese periodo; unas cifras que aumentan entre las grandes empresas, de las cuales un 43 % vende a través de Internet obteniendo por este canal un 27 % de su facturación. Y la pandemia ha exacerbado aún más la tendencia.
La Comisión considera que los cambios facilitarán la actividad empresarial, reducirán el fraude y mejorarán la experiencia de los consumidores, indicó en un comunicado.
VENTANILLA ÚNICA PARA TODA LA UE
Hasta ahora las empresas estaban obligadas a registrarse a efectos del IVA en cada país de la UE en el que venden productos o servicios cuando superan ciertos umbrales de facturación, que oscilan entre los 35.000 y los 100.000 euros dependiendo del Estado.
Con el nuevo sistema, se fija un único umbral común de 10.000 euros. Las empresas que no lleguen a facturar esta suma en otro Estado tendrán que abonar todo el IVA en el país en el que tengan su sede, mientras que aquellas que lo rebasen deberán pagarlo en el país de destino de las mercancías.
Para facilitarles la tarea, se creará una ventanilla única en la que las empresas podrán declarar y pagar de manera electrónica el IVA para todas sus ventas intracomunitarias haciendo una única declaración trimestral, trabajando con la administración tributaria de su propio Estado y en su propio idioma.
De este modo no tendrán que registrarse en varios países y abonarán el IVA a la ventanilla única, que luego se encargará de transferirlo al Estado dónde tenga que ser pagado.
Según la Comisión, esto reducirá en un 95 % los costes para las empresas, que se ahorrarán 2.300 millones de euros.
Para la patronal europea BusinessEurope supone un «un punto de inflexión positivo» que reducirá la carga administrativa y evitará tener que lidiar con administraciones extranjeras, algo que era un problema sobre todo para las pequeñas y medianas empresas.
«A veces los costes para cumplir con el IVA por vender en otro país de la UE eran demasiado altos comparados con las ganancias que tendrían», dijo a Efe Pieter Baert, asesor fiscal de la organización, quien espera que el cambio conlleve un aumento del comercio electrónico y una mejora de la recaudación.
COMPRAS FUERA DE LA UE
Al mismo tiempo, se creará una «ventanilla única de importación» en la que podrán registrarse los vendedores que suministran bienes desde fuera de la UE a clientes de los Veintisiete.
Serán los proveedores y, en algunos casos, las plataformas de venta en línea los que tendrán que encargarse de cobrar el IVA a los consumidores y declararlo y pagarlo en el país dónde se hayan registrado a efectos del IVA.
Los gigantes del comercio electrónico Amazon, Ebay o Rakuten ya se han registrado en esta ventanilla y otros «grandes vendedores chinos» están considerando hacerlo, según fuentes comunitarias.
En la práctica esto supone que cuando los consumidores compren en un proveedor registrado verán el precio con el IVA incluido y lo abonarán en el momento, de modo que las autoridades de aduanas o servicios postales no le reclamarán el impuesto cuando las mercancías lleguen a su destino, ni los cargos adicionales que a veces cobran por esta gestión.
Esto «podría ayudar a que los consumidores tomen decisiones mejor informados» y evitar «tasas sorpresa» en la entrega, apuntan desde la organización de consumidores BEUC. «Ahora tendremos que ver si todos los vendedores cumplen», dijo un portavoz a Efe.
IGUALDAD ENTRE EMPRESAS
Por otra parte, el nuevo sistema deroga la exención del IVA que se aplica actualmente a los paquetes que entran en la UE cuyo valor no excede los 22 euros.
Esta excepción suponía que algunos vendedores de fuera de la UE podían declarar fraudulentamente objetos de valor elevado, como teléfonos inteligentes, a un precio inferior al real para beneficiarse de la exención, algo que perjudica a las empresas comunitarias que no tienen alternativa a repercutir a sus clientes el IVA completo sobre los mismos productos.
Bruselas cree que acabar con ella garantizará la igualdad de condiciones para las empresas europeas y permitirá a los Estados recaudar al menos 7.000 millones de euros más por IVA.
Ese es el cálculo que hizo en 2017, cuando se adoptó la propuesta, por lo que cree que los ingresos extra serán «muchos más» puesto que «el mercado está creciendo un 15 % anual», según fuentes comunitarias.
La UE ingresa cada año unos 140.000 millones de euros menos de lo que debería en IVA debido al fraude, la evasión fiscal o errores de cálculo, una brecha que en España es de unos 4.900 millones, según datos de 2018, unos ingresos especialmente necesarios en plena recuperación económica pospandemia.