La UE y EE.UU acordaron el viernes pasado suspender por un periodo inicial de cuatro meses estos aranceles.
Por EFE
Los aranceles que Estados Unidos y la Unión Europea (UE) se habían impuesto recíprocamente por su disputa sobre los subsidios a Boeing y Airbus quedaron suspendidos este jueves oficialmente, después de que ambas partes acordasen la semana pasada dejar de aplicarlos durante un periodo inicial de cuatro meses.
«Los aranceles por Airbus-Boeing están ahora suspendidos», anunció en Twitter el vicepresidente de la Comisión Europea Valdis Dombrovskis, quien lo calificó de «noticias positivas para los exportadores a ambos lados del Atlántico».
El «próximo paso», indicó el responsable europeo de Comercio, es «encontrar soluciones sobre futuros subsidios al sector aéreo».
La UE y EE.UU acordaron el viernes pasado suspender por un periodo inicial de cuatro meses estos aranceles, mientras se trabaja hacia una solución permanente, durante una llamada telefónica entre la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, y el nuevo presidente estadounidense, Joe Biden.
Durante el mandato de su predecesor, Donald Trump, Washington impuso a la UE en 2019 aranceles por 7.500 millones de dólares (unos 6.200 millones de euros) por las ayudas ilegales concedidas por la UE a Airbus, después de que la Organización Mundial del Comercio (OMC) le diera la razón en la disputa que ambos iniciaron ante este organismo.
Los aranceles afectaban sobre todo a las importaciones de productos como el aceite de oliva, la aceituna de mesa, el vino o el queso procedentes de España, Francia, Alemania y Reino Unido.
Por su parte, la UE respondió en 2020 imponiendo aranceles a las importaciones de Estados Unidos por 4.000 millones de dólares (unos 3.300 millones de euros), cuando la OMC avaló sus alegaciones de que Washington había concedido ayudas ilegales a Boeing.
En concreto, Bruselas impuso unos aranceles del 15 % a la importación de aeronaves y del 25 % a productos como licores, el zumo de naranja, las motocicletas o los tractores.
Tras un mandato de Trump marcado por la imposición de aranceles a la UE, Bruselas se había propuesto tras la llegada de Biden pactar con la administración estadounidense la administración de estos aranceles, así como avanzar en otras áreas que consideran de interés común en materia de comercio, como la reforma de la OMC.