Bajo la dirección de Jassy, AWS ha logrado tanta cuota de mercado que una caída temporal de sus servicios.
Por EFE
Que Jeff Bezos anunciase esta semana su futura retirada al frente de Amazon fue una sorpresa. Que su sustituto sea Andy Jassy, considerado la «sombra» del jefe y quien ha liderado la lucrativa apuesta de la empresa por la nube, ya no tanto.
Por su proximidad a Bezos y por su gestión del segmento de negocio más rentable de la compañía, Jassy encabezaba desde hace tiempo todas las quinielas para dirigir el gigante del comercio electrónico cuando su fundador lo dejase y cabe esperar de él una línea continuista en los próximos años.
UN HOMBRE DE LA CASA
Llegado a la firma de Seattle en 1997 -solo tres años después de su fundación-, Jassy pasó rápidamente a ejercer de asistente técnico de Bezos, razón por la cual en la compañía empezaron a llamarlo la «sombra» y rápidamente identificó ineficiencias dentro de la empresa.
«Convenció a Jeff de que debía invertir en infraestructura para reducir nuestra dependencia. Amazon externalizó algunas de sus APIs y Andy se convirtió en el fundador y jefe de Amazon Web Services (AWS)», contó en Twitter Dan Rose, quien compartió con Jassy esos primeros años en Amazon.
Así, lo que originalmente fue concebido como una manera de ahorrar dinero a la empresa mediante servidores y sistemas de almacenamiento en nube propios terminó siendo un servicio a otras compañías y, con el paso de los años, una parte esencial de la estrategia de futuro de Amazon.
DIRIGE LA SECCIÓN MÁS RENTABLE
Con Jassy liderándola desde sus inicios y en un estado de forma excelente -AWS es líder destacada en el sector y sus beneficios suponen más de la mitad de las ganancias totales de Amazon- es casi seguro que el papel de la computación en nube todavía aumentará más con la nueva dirección.
Y si la tendencia ya era al alza durante los últimos años, la pandemia de covid-19 la ha acelerado todavía más, disparando la base de clientes de AWS y convirtiéndola en un servicio imprescindible para muchas empresas que han pasado a operar en remoto y que por tanto necesitan gigantescas cantidades de almacenamiento digital.
Bajo la dirección de Jassy, AWS ha logrado tanta cuota de mercado que una caída temporal de sus servicios como ocurrió en noviembre pasado puede paralizar la actividad de cientos de miles de empresas y organizaciones.
UNA PARTE DE INTERNET IMPRESCINDIBLE
Entre sus clientes se encuentran Adobe, Spotify, Netflix, Roku, grandes medios del país, como The Washington Post, WNYC y The Philadelphia Inquirer, además de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el Comité Nacional Demócrata.
«Si (a principios de los 2000) creías que las empresas construirían aplicaciones a partir de cero sobre la correcta selección de servicios de infraestructura, ello suponía que el sistema operativo iba a convertirse en internet, algo muy diferente de lo que había ocurrido en los 30 años anteriores», explicó el propio Jassy en su intervención en la conferencia re:Invent de 2016.
Esta visión de futuro, a la que el tiempo dio la razón, es la que ha llevado al jefe de AWS a lo más alto de la tercera empresa con mayor capitalización bursátil del mundo (sólo por detrás de Apple y Microsoft) y con la que cuenta Bezos para dejar su legado en buenas manos ahora que se acerca el momento de su retirada.