La construcción de Palmerola, cuya inversión total ronda los 235 millones de dólares, de los cuales España aportará 53 millones como parte de un programa de reconversión de deuda con Honduras, ha sido criticada.
Por EFE
La virtual presidenta electa de Honduras, Xiomara Castro, dijo este sábado que el contrato de concesión del Aeropuerto Internacional de Palmerola, que hoy inició operaciones en la región central del país, es «ilegal» y anunció que lo revisará.
«Los monopolios son prohibidos constitucionalmente y lesivos al interés nacional. Palmerola es un contrato ilegal y un monopolio que cierra (el aeropuerto internacional) Toncontin afectando al pueblo que me otorgó su mandato de defenderlo», indicó Castro, líder del izquierdista Partido Libertad y Refundación (Libre), en un mensaje en Twitter.
Castro, esposa del expresidente hondureño Manuel Zelaya, derrocado el 28 de junio de 2009, afirmó que el contrato de concesión de Palmerola «elimina competencia, será revisado y modificado en ley».
Las declaraciones de la presidenta electa de Honduras se producen el mismo día de que Palmerola, construido en el valle de Comayagua, departamento del mismo nombre, 75 kilómetros al norte de Tegucigalpa, inició operaciones con un vuelo de la compañía Spirit Airlines, procedente de Houston.
Palmerola es administrado por el consorcio conformado por el grupo hondureño Emco y el operador Aeropuerto Internacional de Múnich, y funciona en el mismo sitio donde opera una base de la Fuerza Aérea Hondureña construida por Estados Unidos a inicios de los años 80 del siglo pasado.
El aeropuerto civil fue licitado en 2015 en el primer mandato del presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, a través de una Alianza Público-Privada.
En un mensaje en Twitter, el presidente ejecutivo de la división Aeropuertos Grupo Emco, Lenir Pérez, invito al nuevo Gobierno de Castro y a la junta de transición a «visitar el Aeropuerto Internacional de Palmerola».
Señaló que el grupo Emco y el operador están «abiertos a revisar el contrato y a escuchar sugerencias de mejora que sean para beneficio y ahorro del pueblo hondureño».
La construcción de Palmerola, cuya inversión total ronda los 235 millones de dólares, de los cuales España aportará 53 millones como parte de un programa de reconversión de deuda con Honduras, ha sido criticada por algunos sectores porque consideran que el Aeropuerto Toncontín quedará relegado a vuelos regionales centroamericanos, locales y privados.