Gioconda Belli se exilió por razones de seguridad desde mayo de 2021 en el marco de una crisis en Nicaragua en la que el Gobierno de Daniel Ortega.
Por EFE
La poeta nicaragüense exiliada en España Gioconda Belli recibió este jueves el doctorado honoris causa de la estatal Universidad de Costa Rica (UCR) por sus aportes a la cultura, la educación y la lucha por la democracia y los derechos humanos.
Belli (Managua, 1948), desnacionalizada por el Gobierno que preside Daniel Ortega en Nicaragua, recibió el máximo reconocimiento que otorga ese centro educativo, que valoró que la escritora utiliza su verso y su prosa para buscar la justicia, la verdad, el respeto y promover de manera invaluable las artes y las humanidades.
«Belli es la escritora centroamericana más conocida y traducida en la historia de la literatura centroamericana», destacó el director del Consejo Universitario de la UCR, Jaime Caravaca, quien explicó que la poeta e intelectual nicaragüense ha hecho invaluables aportes con su activismo político y su producción literaria, en la que ha promovido la cultura y el humanismo, y ha contribuido a generar una conciencia crítica y creativa.
Resaltó que la nicaragüense ha sido reconocida en el sistema literario internacional como una de las grandes figuras de la poesía y de la narrativa castellana, y que su obra ha participado en todas las grandes innovaciones y revoluciones que ha experimentado la literatura latinoamericana.
«La obra de Gioconda Belli, a diferencia de otras autoras y autores de su generación, no le teme a las metáforas, ni a las fábulas, ni a las utopías, para aproximarse a los grandes problemas de la globalización», anotó Caravaca, quien dijo que «su poesía es una de las más populares y difundidas en la lengua castellana».
Celebró que la escritora no teme hablar de las grandes revoluciones del siglo XX, de la menopausia, el dolor ante la pérdida, o del erotismo gozoso, «rompiendo así con algunas restricciones ideológicas impuestas por movimientos ultraconservadores latinoamericanos y al machismo hegemónico».
«Belli sigue levantando la voz por quienes callan»
Por su lado, el rector de la UCR, Gustavo Gutiérrez, dijo que es un honor que en su gestión esa casa de estudios otorgue el doctorado honoris causa a la escritora nicaragüense.
Destacó que Belli es «una mujer que se atrevió a decir sobre sí misma, a tomar la palabra como herramienta de poder, una mujer que no esperó que nadie la describiera, ni que le dijera cómo vivir, sino que tomó las riendas, y a pesar de sus vicisitudes que ha enfrentado como ser humano, ha sabido levantarse».
«Estamos frente a una lectora voraz, lo cual se evidencia en sus poemas y su narrativa. Escritora comprometida con una literatura cuidada, ella conoce el poder de las palabras, por eso sigue levantando la voz por quienes callan, por quienes ya no tienen voz, por quienes han sufrido la violencia de la mordaza», recalcó el rector.
Según la UCR, Belli es un referente mundial de la literatura centroamericana, a través de sus poesías, ensayos y novelas como La Mujer Habitada, El País de las Mujeres, El Taller de las Mariposas, El Infinito en la Palma de la Mano, entre muchos otros textos en los que relata vivencias a partir de la historia y la realidad latinoamericanas y las utiliza como un medio para la denuncia y transformación sociales.
Gioconda Belli agradece a Costa Rica
La escritoria, que dictó una conferencia titulada La esperanza: una isla en la niebla, agradeció a la UCR por el doctorado honoris causa, el primero que recibe, y expresó su cariño por Costa Rica, donde vivió su primer exilio.
Gioconda Belli se exilió por razones de seguridad desde mayo de 2021 en el marco de una crisis en Nicaragua en la que el Gobierno de Daniel Ortega ha sido acusado por organismos internacionales y diversos países de cometer violaciones a los derechos humanos y perseguir a sus críticos y opositores.
El 15 de febrero de 2023, las autoridades nicaragüenses privaron a Belli de la nacionalidad y de sus bienes, junto a otros 93 nicaragüenses, a los que declararon traidores a la patria y prófugos de la justicia.
Al momento de su desnacionalización, Belli residía en España, país que le ha concedido la nacionalidad y donde continúa viviendo.