Se mantienen el toque de queda nocturno en todo el país, la cuarentena total los fines de semanas en 5 de las 10 provincias del país.
Por EFE
El Gobierno de Panamá anunció este martes que a partir del próximo lunes podrán reabrir en todo el país las ventas minoristas, salas de belleza y barberías, ventas de autos, la construcción y las ONG, aunque se mantendrán las restricciones a la movilidad en el marco de la pandemia de la COVID-19.
«Estamos en el camino correcto», la reactivación de estas actividades se ha decidido tras una mejora en indicadores como el RT o tasa de transmisión de la COVID-19, el reforzamiento de la capacidad hospitalaria y un análisis de la situación socioeconómica, dijo el ministro de Salud, Francisco Sucre.
A partir del próximo lunes podrán abrir las salas de belleza y barberías a una capacidad del 50 % y solo podrán recibir a los clientes mediante previa cita y con medidas de bioseguridad.
Las tiendas minoritas, que ya desde hace más de dos meses pueden vender por internet y con entrega a domicilio, podrán ahora despachar a los clientes que hayan hecho el pedido a través de la web en la puerta del local, pues no se permite que entren al mismo, o en el estacionamiento, siempre por cita.
Se ha autorizado a proseguir los proyectos de construcción con un avance significativo, las ventas de autos y las 164 organizaciones no gubernamentales (ONG) que hay en el país, siempre cumpliendo con todas las medidas de bioseguridad establecidas.
Se mantienen el toque de queda nocturno en todo el país, la cuarentena total los fines de semanas en 5 de las 10 provincias del país, entre ellas Panamá, donde está la capital, y Panamá Oeste, donde además las personas solo pueden salir dos horas diarias en función de su número de identidad personas y género debido a la alta incidencia de la COVID-19.
Otras actividades que se abrieron a nivel nacional entre el 13 de mayo y el 1 de junio son los servicios técnicos y talleres automotrices, la pesca y la industria, entre otros, mientras que sectores esenciales como salud, alimentación y transporte nunca pararon en Panamá, que decretó la emergencia a mediados de marzo por la pandemia.
La economía de Panamá se derrumbará un 9 % este 2020, según cálculos del Gobierno, y el sector privado exige una ruta clara para la reapertura tras denunciar lo que considera una «falta de urgencia» por parte de las autoridades.
LAS CIFRAS DE LA PANDEMIA EN PANAMÁ
Panamá registró este lunes 1.115 casos y 16 nuevas muertes por la COVID-19, que elevaron a 76.464 la cantidad de contagios y a 1.680 las defunciones por la enfermedad en 156 días de pandemia.
El informe epidemiológico reportó que hay 1.509 hospitalizados en sala general y 160 en las unidades de cuidados intensivos (UCI), mientras que en aislamiento domiciliario permanecen 21.872 personas, y otras 578 en hoteles-hospitales.
Desde que se descubrió el primer caso el 9 de marzo pasado, se han hecho 255.418 pruebas de detección de contagio por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 (COVID-19), de las cuales el 30 % han dado positivo.
Las pruebas por 100.000 habitantes ascienden a 5.970, con 3.037 efectuadas en las últimas 24 horas, para una positividad de 36 %.
Las autoridades destacaron que letalidad de la enfermedad es del 2,2 %, mientras que el RT (número reproductivo de contagio) se sitúa en 1,07, más cercano al uno.
Explicaron que hay una desaceleración en los contagios diarios, tras una desbandada que se prolongó más de dos meses, así como un descenso en las defunciones desde el 27 de julio pasado y en la tasa de mortalidad diaria.