Managua y Moscú inauguraron la Asociación para la Cooperación Comercial entre Rusia y Nicaragua.
Por EFE
Nicaragua y Rusia firmaron este martes un acuerdo de cooperación «con el objetivo de promover el uso pacífico de las tecnologías nucleares aplicadas a la energía, agricultura y medicina», informó el Gobierno de Managua.
El acuerdo fue suscrito en el marco de una visita oficial de una delegación nicaragüense conformada por los hermanos Laureano y Rafael Ortega Murillo, hijos del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y de la vicepresidenta Rosario Murillo, indicó el Gobierno de Managua, en una declaración.
Laureano, asesor presidencial para las Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional, y Rafael, delegado presidencial, integraron la delegación nicaragüense junto al ministro de Hacienda y Crédito Público, Iván Acosta, y la embajadora de Managua en Moscú, Alba Torres.
Esa delegación se reunió durante el último día de la visita oficial con el director general de la Corporación Estatal de Energía Atómica de Rusia (Rosatom), Nikolay Spassky.
«Durante el encuentro se ha firmado un Acuerdo de Cooperación con el objetivo de promover el uso pacífico de las tecnologías nucleares aplicadas a la Energía, Agricultura y Medicina», puntualizó Managua.
ASOCIACIÓN PARA COOPERACIÓN COMERCIAL
Asimismo, Managua y Moscú inauguraron la Asociación para la Cooperación Comercial entre Rusia y Nicaragua, que preside el exembajador ruso en Nicaragua, Nikolai Vladimir, de acuerdo con la información.
«La Asociación para la Cooperación Comercial entre Rusia y Nicaragua será el vehículo para la atracción de inversiones rusas en Nicaragua, así como promotora del comercio bilateral y multilateral proyectando a Nicaragua como una plataforma regional para los productos rusos y a Rusia como una plataforma regional para los productos nicaragüenses», explicó Managua.
El acto, que se llevó a cabo en la Casa de América Latina, en Moscú, contó con la participación de la doctora Veronika Skvortsova, directora de la Agencia Federal Médico Biológica de Rusia y copresidenta de la Comisión Mixta Rusia/Nicaragua.
La misión nicaragüense, que comenzó su agenda de trabajo el lunes, sostuvo encuentro con el vicecanciller de Rusia, Sergei Ryabkov, con quien revisaron «los principales asuntos de la agenda bilateral en los ámbitos político, económico y comercial».
La delegación nicaragüense también se reunió con el vicepresidente del Consejo General del Partido Rusia Unida, Andrey Klimov, «con el objetivo de estrechar lazos con el partido FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional) a través de la firma de un acuerdo de cooperación y hermanamiento que se prepara entre ambas organizaciones», de acuerdo a la información.
NICARAGUA SOCIO «MUY IMPORTANTE» DE RUSIA
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha dicho que Nicaragua es un socio «muy importante» de Rusia en América Latina, y felicitó a Ortega por su «victoria abrumadora» en las elecciones del pasado 7 de noviembre, y afirmó que intensificará la cooperación bilateral «estratégica» con el país centroamericano.
Esos comicios, en los que el exguerrillero se impuso con un 75,87 % de los votos para un quinto mandato y cuarto consecutivo, con sus principales contendientes en prisión, no han sido reconocidos por el grueso de la comunidad internacional.
Desde que Ortega volvió a la presidencia en 2007, tras haber coordinado una Junta de Gobierno de 1979 a 1985 y presidir por primera vez el país de 1985 a 1990, Nicaragua y Rusia han fortalecido sus relaciones en todos los campos.
Rusia, un antiguo aliado de Nicaragua, que durante el primer régimen sandinista (1979-1990) dotó de armamento soviético a las Fuerzas Armadas nicaragüenses, estableció relaciones diplomáticas con Managua en 1944.
Nicaragua es uno de los contados países, junto a Venezuela y los pequeños Estados insulares de Nauru y Tuvalu, que se han sumado a Rusia en el reconocimiento de la independencia de las regiones separatistas georgianas de Abjasia y Osetia del Sur.
Además, a fines de 2020 Nicaragua estableció un consulado en Crimea, territorio ucraniano anexado a Rusia, lo que provocó el rechazo de Ucrania.