La compañía argentina apuesta por el país al ser una puerta al comercio mundial, gracias a su salida hacia al Mar Caribe y al Océano Pacífico, además del Canal de Panamá y el Aeropuerto Internacional de Tocumen.
Por Revista Summa.
El desempeño y la eficiencia de los sectores marítimo, logístico y portuario han hecho de Panamá un hub competitivo, permitiendo que se posicione como una de las principales puertas para el movimiento de cargas a nivel mundial. Interboders, especialista en Comercio Exterior, Logística y Aduana, anuncia el inicio de sus operaciones y apuesta por convertirse en uno de los principales competidores dentro del mercado panameño.
Interborders inició con un movimiento que superó los 300 TEUS (unidad de transporte marítimo para medir la capacidad de carga) en el primer mes de operación, apuntando a 500 TEUS mensuales.
La compañía de origen argentino estará operando desde su depósito en la Zona Libre de Colón, la segunda zona franca más grande del mundo. Con ocho años de trayectoria tiene presencia en Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Estados Unidos y ahora en Panamá.
La bodega de Interborders es de 4.200m², asegurando un almacenamiento eficiente de las mercancías; cuenta con 2.000 posiciones de racks, lo que garantiza una organización óptima y accesibilidad a los productos; y tiene un espacio de temperatura controlada, lo que posibilita el almacenamiento de otras mercancías con requerimientos específicos. Adicionalmente, el depósito está controlado por un avanzado sistema de alarma contra incendios, asegurando una respuesta rápida y efectiva en caso de emergencia.
Con el objetivo de velar por el adecuado manejo de los activos de los clientes y brindar un servicio de calidad, Interborders creó 15 empleos directos y alrededor de 25 indirectos enfocados en importación, exportación y logística, como inicio de su operación en el país. Datos de la Cámara Marítima de Panamá indican que el conglomerado marítimo/logístico representa casi un tercio de la economía y excede los 320.000 empleos totales.
Minerva De Gracia, Desarrolladora de Negocios en Centroamérica y el Caribe para Interborders, comenta que “la ubicación de Panamá como un hub logístico global representa una oportunidad ideal para implementar nuestras soluciones innovadoras y capacidades logísticas de clase mundial. El objetivo es ser el aliado estratégico de quienes necesiten movilizar cargas dentro y fuera del país; para ello, proporcionaremos servicios de alta calidad que optimicen la cadena de suministro y fomenten el crecimiento económico. Sumado a esto, también destacamos la estabilidad, el clima de inversión y el talento humano del país».
Panamá es un punto clave en la dinámica del Comercio Internacional gracias al Canal, a sus salidas hacia el Océano Pacífico y el Mar Caribe, y al Aeropuerto Internacional de Tocumen. Esta ventaja, optimiza los tiempos en el traslado de mercancías, haciendo los procesos de importación y exportación mucho más ágiles y accesibles. Es así como el país se establece como un hub relevante, desde el cual se ofrecen soluciones integrales de transporte por vías marítimas, aéreas y terrestres.
Si bien el sector ha enfrentado en los últimos años grandes retos por factores sociales, políticos y económicos, sus actividades aportan B/8.364 millones a la economía nacional (unos US$8.3 millones), es decir un 11.4% del Producto Interno Bruto (PIB).
Bajo este panorama, Interborders busca impactar positivamente en el mercado panameño mediante sus ventajas competitivas y su contribución al dinamismo económico nacional, posicionándose en un corto plazo como un líder destacado. “Vemos un enorme potencial en Panamá y estamos convencidos de que nuestras operaciones contribuirán al crecimiento económico del país. Con una infraestructura robusta y un equipo altamente capacitado, buscamos establecer nuevos estándares de eficiencia, calidad y excelencia operativa, satisfaciendo las necesidades de clientes locales e internacionales. Todo en beneficio de nuestro negocio, socios comerciales y desarrollo del mercado panameño”, indicó Lucas Bianchi, CEO de Interborders.