A medida que avanza este año, las esperanzas de un aterrizaje suave para la economía mundial, con una inflación descendente y un crecimiento constante, se ven amenazadas por un costo de vida obstinadamente alto y recientes inestabilidades en el sector financiero.
Por Revista Summa
Si la palabra clave para describir la proyección económica al inicio de 2023 era incertidumbre, para lo que queda del año debe ser prudencia. César Addario Soljancic, vicepresidente regional de EXOR Latam para Centroamérica y el Caribe, destaca que pese a la reducción de la inflación, gracias a las tasas de interés en aumento y la disminución de los precios de la energía y los alimentos, la presión sobre los precios persiste en diversas economías, debido a la escasez de mano de obra.
“Golpes que han expuesto fragilidades del sector bancario internacional y el miedo al contagio en el resto del sistema financiero han provocado temores. Las autoridades económicas estadounidenses y europeas han tomado medidas firmes para calmar los ánimos y esperamos que éstas tengan buenos resultados”, señala.
En el informe de perspectivas para 2023 que publicó a principios de año EXOR Latam se destaca que las influencias que afectaron la economía mundial en 2022 continúan presentes, pero con diferente intensidad. Además, los altos niveles de deuda limitan la capacidad de respuesta de las autoridades fiscales a nuevos desafíos.
“Según los pronósticos del Fondo Monetario Internacional, se espera que el crecimiento mundial disminuya del 3,4% en 2022 al 2,8% en 2023, con vistas a estabilizarse en un 3% en cinco años”, determina Addario.
Mayores riesgos
- Los altos costos del endeudamiento y un crecimiento económico más lento podrían intensificar el sobreendeudamiento soberano.
- La crisis en Ucrania podría provocar más aumentos en los precios de los alimentos y la energía, presionando aún más la inflación.
- Hay que seguir de cerca al sector financiero, pues un mayor contagio en este deterioraría las condiciones de financiamiento.
- Un factor esencial para tener en cuenta es la inflación persistente, que puede erosionar el valor de las inversiones a largo plazo si no se gestiona adecuadamente.
Oportunidades
- Movimientos hacia inversiones que proporcionan cierta protección contra la inflación, como los bonos del Tesoro, los bienes raíces o las materias primas.
- Sin bien el aumento de las tasas de interés disminuye el atractivo de los bonos de bajo rendimiento y los préstamos a largo plazo, también puede ofrecer oportunidades para obtener rendimientos más altos en inversiones a corto plazo y activos de mayor rendimiento.