De acuerdo con los diputados, «este es el presupuesto con la inversión pública más grande de la historia del país».
Por EFE
La Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó este miércoles el presupuesto general del Estado para 2022 por 7.967,7 millones de dólares entre críticas de la oposición.
El presupuesto fue aprobado con 64 votos de los 84 diputados de la Asamblea Legislativa, que el martes autorizó al Gobierno para adquirir la deuda por más de 498 millones de dólares para cubrir la brecha entre gastos e ingresos.
La asignación de fondos aprobada, con los votos de los partidos oficialistas, busca «consolidar el proceso de recuperación económico, debido a los efectos ocasionados por la pandemia de la covid-19».
Este presupuesto, según el dictamen votado, es superior en más de 544 millones de dólares al votado para el año 2021, lo que representa un incremento del 7,3 %.
De acuerdo con los diputados, «este es el presupuesto con la inversión pública más grande de la historia del país» con 1.701 millones de dólares.
Los fondos destinados para la cartera de Educación son de 1.470 millones y de 1.083 millones para Salud, mientras que Seguridad y Defensa tendrán 890 millones.
Por otra parte, el presupuesto estipula 553,2 millones de dólares para el pago de la deuda previsional, de los que 151,2 millones son para pagar las pensiones de los jubilados mediante el sistema público y cerca de 402 millones para amortizar la deuda con las administradoras privadas de fondos de pensiones.
Los diputados también autorizaron al Gobierno para «adquirir deudas flotantes» (letras del tesoro de la nación) por hasta un 25 % de los ingresos corrientes, es decir unos 1.641,7 millones de dólares.
El Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) recomendó a la Asamblea Legislativa liquidar un fideicomiso estatal de 150 millones de dólares, usado para la adopción del bitcóin, para sumar esos recursos al presupuesto estatal de 2022 y reducir el déficit del mismo.
El Icefi advirtió recientemente que la «situación fiscal sigue siendo crítica» y que «se han agravado las dificultades en el acceso al financiamiento internacional» y citó como ejemplo la no concreción de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por 1.300 millones de dólares.
Agregó que el país tampoco puede emitir bonos por el «alto perfil de riesgo del país», generado por las decisiones políticas del Congreso y el Gobierno de Nayib Bukele.
De acuerdo con el Banco Central de Reserva (BCR), El Salvador poseía hasta octubre pasado una deuda de 16.673,87 millones de dólares, 1.036,84 millones más que la deuda de 15.637,03 registrada hasta el mismo mes en 2020.
La diputada opositora, del partido Vamos, Claudia Ortiz. al igual que Icefi, señaló que es falso que la necesidad de deuda para cubrir el déficit del presupuesto sea de 498 millones de dólares, sino que de 1.209 millones.
Puso en duda la transparencia con la que se manejarán los fondos, dado que existen «señalamientos serios de corrupción».
Anabel Belloso, del opositor Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), dijo que «lo que no les gusta (al Gobierno y diputados del oficialismo) es que se les exija transparencia» y afirmó que es el presupuesto de los últimos años con menores recursos para el «cumplimiento de la Ley para una Vida Libre de Violencia Contra la Mujer».