Dinamiza la economía y el empleo en todas las regiones del país al impulsar 11,4% del PIB.
Por Revista Summa
La construcción es uno de los mayores motores de generación de empleo y desarrollo, para el año 2024 representó un 11,4% del Producto Interno Bruto (PIB), generó más de 489.000 empleos, y activó miles de empresas proveedoras en todo el país.
La Cámara Costarricense de la Construcción (CCC) destaca el peso decisivo del sector en la economía nacional y su impacto positivo, cada proyecto involucra equipos de obreros, ingeniería, arquitectura, transportistas, y técnicos especializados, entre otros.
“Detrás de cada carretera, escuela, hospital, aeropuerto o vivienda, hay una cadena de valor que impulsa el crecimiento económico, la innovación y el bienestar de las familias”, afirmó Randall Murillo, director ejecutivo de la CCC. La CCC resalta que fortalecer esto es clave para una recuperación económica robusta. “Una obra de infraestructura es mucho más que una estructura física. Es empleo directo e indirecto, es inversión nacional, es reactivación para decenas de sectores”, añadió Murillo.
El gremio hace un llamado al Estado costarricense para continuar generando condiciones que permitan agilizar proyectos de infraestructura pública y privada, la inversión, la formalidad laboral y el desarrollo nacional. “No solo construimos obras. Construimos futuro”, concluyó el representante de la CCC.
Construcción sostenible y responsable. La CCC reafirma su compromiso con una construcción sostenible, responsable y con visión de largo plazo. Las obras de hoy deben responder a los desafíos del mañana, integrando prácticas que minimicen el impacto ambiental, mejoren la eficiencia energética, promuevan el uso responsable de recursos y el desarrollo social.
La Cámara Costarricense de la Construcción (CCC) reafirma su compromiso con una construcción sostenible, entendida como un enfoque integral que considera no solo el impacto ambiental, sino también el desarrollo social y la viabilidad económica.
Cada vez más proyectos incorporan tecnologías limpias, materiales ecoeficientes y procesos de planificación integrales, que no solo elevan los estándares de calidad, sino que también aportan a un desarrollo más equilibrado y resiliente.
Las obras de hoy deben anticiparse a los retos del futuro, incorporando prácticas que reduzcan las emisiones, optimicen el uso de recursos, impulsen la eficiencia energética y generen valor para las comunidades.
Desde la CCC impulsamos la competitividad y el desarrollo sostenible de la industria de la construcción para el bienestar de la sociedad.