La empresa -creada en China en 2008 y que trasladó su sede a Singapur- tiene una gran acogida entre las generaciones más jóvenes.
Por EFE
El gigante textil de origen chino Shein solicitó este lunes de manera confidencial su salida a bolsa en Estados Unidos, un acontecimiento que podría producirse en 2024, según informó The Wall Street Journal.
El diario, que cita fuentes conocedoras del asunto, indica que Shein ha contratado a las grandes financieras Goldman Sachs, JPMorgan Chase y Morgan Stanley para la operación, sobre la que se había especulado en los últimos meses.
El medio agrega que en su última ronda privada, Shein obtuvo una valoración de unos 66.000 millones de dólares y que podría buscar una cifra más alta para su incursión en Wall Street.
La empresa -creada en China en 2008 y que trasladó su sede a Singapur- tiene una gran acogida entre las generaciones más jóvenes y se ha convertido en una de las mayores empresas de moda del mundo.
En el ejercicio 2022, tuvo unos beneficios de 800 millones de dólares y una facturación de 23.000 millones.
Shein se centra en el comercio electrónico, con la excepción de tiendas físicas efímeras o «pop-up stores», y goza de una gran internacionalización, con Estados Unidos como su principal mercado seguido por Europa.
Al mismo tiempo, es criticada por su modelo de negocio de «moda rápida» y consumismo, basado en producir industrialmente un gran volumen de prendas, con mucha rotación y a precios muy bajos, lo que genera un fuerte impacto ambiental.
Las autoridades estadounidenses han pedido investigar la cadena de suministro de Shein, como condición para su salida a bolsa, agrega el Journal, para saber si obtiene algodón de la región de Xinjiang, sancionado por Washington por presunto uso del trabajo forzoso de la etnia uigur.
Este año, la empresa cerró un acuerdo con el grupo estadounidense SPARC, propietario de Forever 21 y otras tiendas de ropa, para ampliar su alcance en el mercado minorista de EE. UU. y en internet, y compró la marca británica Missguided.