La industria ocupa hoy más de 30.000 metros cuadrados de área arrendable en la Ciudad de Panamá, y se prevé que se duplique en los próximos 5 años.
Por Revista Summa
El área arrendable de los espacios de oficinas flexibles o coworking de la Ciudad de Panamá creció cerca de un 28% entre 2020 y 2023, y hoy abarca 30.661 metros cuadrados. Su crecimiento se ha mantenido desde hace más de una década y se espera que en cinco años duplique estos números.
Así se desprende de los informes realizados por el equipo de investigación de mercados de Newmark Central America, liderado por Danny Quirós. La tendencia se debe, entre otros factores, a la sobreoferta registrada por el mercado de oficinas desde el 2018 la cual ha motivado la creación de nuevos espacios por parte de operadores locales y regionales.
Además, Newmark reporta la entrada de nuevos participantes, entre ellos, desarrolladores y propietarios que han adecuado espacios ociosos para ofrecer este tipo de servicios.
Área Bancaria, Costa del Este y Punta Pacífica concentran la mayor cantidad de inventario de espacios compartidos con un 35%, 27% y 18%, respectivamente. “En los próximos años, la oferta también crecerá en sectores periféricos con alta concentración demográfica para cumplir con el propósito de evitar largos desplazamientos de colaboradores”, explicó Danny Quirós, Market Research Director de Newmark en Centroamérica.
¿Quiénes son los usuarios frecuentes?
El estudio de Newmark Central America indica que los principales usuarios de los coworking en Panamá son trabajadores independientes o freelancers, startups, empresas pequeñas y medianas que los utilizan como alternativas a los alquileres de oficinas tradicionales, y firmas grandes que los usan para expandirse a nuevas áreas geográficas.
Todos estos perfiles tienen algo en común: buscan flexibilidad en los contratos de arrendamiento, ahorro de costos, ya que no tienen que hacer grandes inversiones en mobiliario, servicios públicos y otros; y una comunidad empresarial que les permite colaborar y generar nuevos negocios.
Adicionalmente, los usuarios de coworking a menudo buscan una amplia gama de comodidades y servicios para mejorar su experiencia de trabajo y aumentar su productividad. Amenidades, salas de reuniones, impresoras, cafeterías, gimnasio, zonas de juegos y otros, les permiten ser más eficientes, flexibles y productivos.
Sin embargo, deben lidiar también con costos variables y hasta impredecibles debido a los cambios en la demanda, y en ocasiones, puede ocurrir una pérdida de privacidad al ser espacios abiertos y compartidos.
Por su parte, los propietarios de oficinas compartidas tienen la ventaja de asegurarse ingresos estables (a través de contratos a largo plazo) y una utilización eficiente del espacio. En contraste, deben lidiar con una demanda difícil de predecir y variable, y costos de mantenimiento elevados.
Tipos de formato
Newmark distingue tres tipos de formato de oficinas compartidas: open space (espacio abierto donde usuarios comparten un área común de trabajo sin tener un lugar específico), escritorios asignados (usuarios tienen zona específica y de reserva exclusiva) y oficinas privadas (puertas cerradas y acceso exclusivo). Estas últimas abarcan más de la mitad del mercado actual, seguido de los escritorios asignados y el espacio abierto.
De acuerdo con Danny Quirós, los precios de alquiler en coworking de la Ciudad de Panamá se mantienen en rangos muy amplios, según el formato, el operador, las amenidades y los servicios ofrecidos. Por ejemplo, pueden variar desde $49-$279 en open space a $200-$1100 en oficinas privadas.
La investigación de Newmark concluye que este modelo seguirá creciendo en los próximos años a medida que las empresas logren definir sus modelos de trabajo. “A pesar de que no es un reemplazo de la oficina tradicional, esta tendencia ay que la industria inmobiliaria de oficinas siga avanzando y alcance niveles de equilibrio próximamente”, señala Quirós.