Hoteles, oficinas y diversas instancias, deben estar adaptadas a las nuevas exigencias.
Por Revista Summa
Una serie de cambios en infraestructura, conectividad, acceso a sitios remotos, así como reducir costos y exoneraciones en las cargas impositivas, son parte de las condiciones que deberá generar nuestro país, si desea convertirse en unos de los principales polos de interés para los nómadas digitales.
Para Gabriela Roberti, Directora de Grupo Innova, firma experta en el área de recursos humanos, las exigencias para el país es contar con “hoteles y estancias que se adapten a esas necesidades de los nómadas digitales, por ejemplo, espacios como coworking.
También es importante mejorar los servicios como internet, que es el principal insumo de trabajo y resulta indispensable un servicio de alta capacidad”.
Otra de las recomendaciones de los expertos es elevar los índices de seguridad para hacer de Costa Rica un país atractivo y destacar en campañas de mercadeo, el potencial que tiene el país.
“Como país nos hemos destacado por una política ambiental que resulta atractiva, como también lo es su gente, los paisajes y la cultura, todo esto nos favorece para que los nómadas consideren este país para asentarse y hacer vida. En la página
www.nomadlist.com que es referencia para las personas que realizan trabajos como nómadas en el mundo, se detalla que Costa Rica tiene una media entre $1300 en Liberia a $2600 en Santa Teresa de ingresos necesarios para trabajar en estos lugares”, mencionó Gabriela Roberti de Grupo Innova.
Recordemos que la llegada de nómadas digitales se puede convertir en una oportunidad de negocio para empresas de bienes y servicios, que se enfoquen en este nuevo mercado con necesidades y problemas específicos y con la creación de alternativas se podrían generar incentivos de atracción para esta nueva modalidad de trabajo.
En Costa Rica con la creación de la ley y el reglamento, se normaliza la actividad de los nómadas digitales y se incentiva la llegada de una mayor cantidad de estos profesionales que ahora laborarían de forma remota desde Costa Rica para el extranjero, siendo una fuente de divisas importantes para el país, permitiendo dinamizar la economía existente.
Ser nómada digital, más que una forma de trabajo, es un estilo de vida. Se definen como profesionales que han adoptado una vida nómada, es decir, que va de un lugar a otro y no se establece en ningún sitio de forma permanente, apalancándose en la tecnología para trabajar de forma remota pudiendo trabajar en cualquier ubicación geográfica, con flexibilidad de tiempo y sin dejar a un lado el desarrollo profesional.
Para Roberti, en un mundo globalizado y digitalizado, donde abundan trabajadores y podría escasear cierto talento humano en ramas especificas se genera un nuevo concepto con los nómadas digitales, pues no solamente son las empresas tratan de contener a sus mejores colaboradores, sino que ahora son los países y las regiones que se han sumado a la carrera de obtener y retener el mejor talento para mantener e impulsar su desarrollo.