Se procesarán hasta 90 toneladas de plástico por día en nueva instalación en Costa Rica.
Por Revista Summa
El primer gran paso en el planeta en la transformación de desechos plásticos no deseados en productos para la construcción se dio en Costa Rica, este 20 de junio con la inauguración de la primera planta a escala industrial.
CRDC Global, una empresa internacional y PEDREGAL abrieron hoy una planta de última generación, la primera en su tipo en el mundo con una solución innovadora, capaz de convertir desechos plásticos no valorizables en un agregado de valor llamado RESIN8™ para uso en la industria de la construcción.
En el mundo se reciclan entre el 6% y 16% de los residuos plásticos. El volumen restante acaba en vertederos, en el océano o se incinera, ocasionando un impacto por año de más de 150 millones de toneladas de CO2 y de gases de efecto invernadero.
Uno de los pasos fundamentales para consolidar CRDC Global fue asociarse a Alliance to End Plastic Waste, una organización mundial sin fines de lucro constituida por las 90 empresas miembros comprometidas a poner fin a los residuos de plástico en el medio ambiente por medio de la creación y ampliación de soluciones innovadoras para el mundo.
Adicional a la planta en Costa Rica, CRDC Global expandirá su presencia en el mercado norteamericano, en el segundo semestre de este año, con una nueva planta de producción de 1300 m2, en York, Pensilvania con la que se podrán procesar alrededor de 9,000 toneladas de desechos plásticos por año.
Actualmente se cuentan con plantas de menor escala en Sudáfrica. En planes inmediatos, se trabaja en plantas en Reino Unido, México, Somoa, Australia y Chile. En el mediano plazo se instalarán más plantas en Estados Unidos, Portugal, India, Hong Kong, Nueva Zelanda, Ecuador, Brasil, Uruguay, Panamá, República Dominicana y El Salvador.
Primera planta en el mundo
A plena capacidad, la planta en Costa Rica podrá procesar hasta 90 toneladas de desechos plásticos por día, utilizando un proceso probado y patentado para producir llamado RESIN8.
El Ministerio de Salud estima que en el país se desechan diariamente 110 toneladas de material plástico en el medio ambiente. Con esta tecnología patentada, se podrá transformar alrededor del 80% de esos desechos.
Diseñado para la industria de la construcción, RESIN8 es único en el mundo ya que se elabora a partir cualquier tipo de residuo plástico (resinas 1-7). El agregado ha sido ampliamente probado para mejorar la integridad del concreto o el asfalto y crea una solución viable para la industria de la construcción.
Para lograr el RESIN8 destinaron tres años en innovación y desarrollo. RESIN8 es adecuado para numerosas aplicaciones, incluidos bloques y adoquines de concreto, elementos de concreto prefabricado, concreto premezclado, morteros e incluso mezcla asfáltica en caliente. El material resultante es hasta un 15 % más ligero o más resistente según su uso, con hasta un 20 % mejores propiedades de aislamiento térmico y acústico que el concreto tradicional.
“El producto nació en Costa Rica. Nos llena de orgullo y satisfacción también poder realizar este lanzamiento precisamente aquí. Esto permite que nuestro país continúe posicionándose como un referente mundial en el desarrollo sostenible y en el resguardo del medio ambiente. Nos sentimos muy orgullosos de poder presentar una solución innovadora, eficiente, sostenible y escalable”, dijo David Zamora, Director Comercial de PEDREGAL, en el lanzamiento oficial de la planta.
Por su parte Donald Thomson, fundador y presidente de CRDC Global, enfatizó que esto es solo el comienzo: “Estamos en un viaje para ofrecer una solución escalable, regenerativa y circular para terminar con la contaminación mundial de los desechos plásticos de una vez por todas.
El presidente Alliance to End Plastic Waste, Jacob Duer, dijo que la Alianza tiene la misión de terminar con los desechos plásticos en el medio ambiente, lo que significa encontrar soluciones viables para avanzar en una economía circular y garantizar su capacidad de escalar para generar impacto. “Junto con CRDC, podemos ayudar a impulsar el valor ambiental, económico y social de los plásticos difíciles de reciclar”, expresó.