Con ella se ayuda al Fondo de Biodiversidad Sostenible, único fondo en el mundo que se dedica a administrar
y gestionar el pago de servicios ambientales.
Por Revista Summa
El Conglomerado Financiero Banco Nacional de Costa Rica (CFBNCR) lanza la BN Débito Verde fabricada en un 86% de PVC (policloruro de vinilo), el cual es un material hecho del reciclado de otros productos plásticos y que, a su vez, ayuda a reducir el impacto ambiental.
La entidad financiera apuesta por el medio ambiente, por tanto pretende que a más tardar a finales del próximo año dicha tarjeta sea en un 100% de PVC reciclado, ofreciendo a sus clientes soluciones financieras sostenibles, como en este caso, un producto con materiales eco amigables, que permite reutilizar los plásticos ya usados y con ello evitar el incremento innecesario de los mismos.
“En el CFBNCR sabemos hacer banca responsable y sostenible, es por eso que nuestra BN Débito Verde es hoy aún más verde que nunca al elaborarse con un 86% de plástico reciclado, asimismo, mediante esta se aporta el 10% de las utilidades de las compras que las personas realizan con ella al Fondo de Biodiversidad Sostenible (FBS), para proteger los bosques y la fauna silvestre costarricense. Somos un banco que se ha comprometido por cuidar el planeta, por hacer un negocio sostenible y mejorar la calidad de vida de las personas, con ello reafirmamos nuestro compromiso por una Costa Rica más sostenible”, según indicó Silvia Chaves, Jefe de Sostenibilidad del Banco Nacional.
Única tarjeta de su tipo en todo el mundo
El CFBN en alianza con el FBS y la Fundación Banco Ambiental (FUNBAM) crearon la tarjeta BN Débito Verde, la cual procura la protección para la biodiversidad y apoya las acciones de desarrollo sostenible del país, mediante el aporte del 10% de la comisión neta de intercambio que gana la entidad bancaria al FBS.
Desde su lanzamiento en el 2010, y hasta el mes de julio de este año, la entidad financiera reporta 259.893 tarjetas activas en total y producto del aporte del 10% de las compras efectuadas con estas, del año 2018 a julio del 2020 se han trasladado al FBS más de US$1.3 millones.
Los recursos aportados por la institución al FBS se invierten al Programa de Conservación de la Biodiversidad que protege el Bosque Tropical Seco en la zona Norte de Guanacaste, que es parte del 2% de bosques secos del mundo. También se preservan más de 7 mil hectáreas de bosque privado en 92 fincas a lo largo y ancho del territorio nacional, el 88% de estas fincas están ubicadas en Corredores Biológicos que conectan paisajes, ecosistemas y hábitat naturales destinados a la conservación de la flora y fauna tica.