Más de 40 mil personas que se encuentran en exclusión y riesgo social, son atendidas mensualmente y este número va en aumento.
Por Revista Summa
En momentos de necesidad e incertidumbre, la solidaridad y el trabajo incansable son imperativos para salir adelante. Costa Rica al igual que el mundo sufre una pandemia histórica que llama a la sociedad a ser fuerte, empática y redoblar esfuerzos para salir lo mejor librados de la propagación del Covid-19.
Desde hace ocho años, el Banco de Alimentos en coordinación con 250 organizaciones sociales y comunitarias trabajan incansablemente para llevar alimentos y artículos de primera necesidad a personas vulnerables y en riesgo social.
De acuerdo Francia Linares, Directora Ejecutiva del Banco de Alimentos, mensualmente se atienden 40 mil personas y en este momento se están atendiendo muchos más, quienes a través de estas ONG´s reciben alimentación, artículos de limpieza y primera necesidad. ¨Actualmente muchas de las organizaciones debido al distanciamiento social están preparando bolsas para que los puedan llevar a sus hogares y no dejarlos desprotegidos¨, agregó.
En medio de la pandemia, tanto el Banco de Alimentos como las organizaciones aliadas no descansan en la labor de acompañar a miles de personas afectadas por la crisis sanitaria y económica. Estas organizaciones están recibiendo miles de solicitudes diarias de personas que urgen hoy más que nunca del apoyo.
“Estamos trabajando al 100% por estas poblaciones. Somos consientes que la solidaridad de las empresas no se acaba y todos los días nos llegan los camiones repletos de comida y productos básicos para atender a la población que lo necesita. Esta es la actitud que debemos tener todos en medio de una emergencia de este tipo” señaló Linares.
Linares indica que el Banco de Alimentos no atiende solicitudes de la población en sus instalaciones, todas estas se canalizan a través de las ONG´s. Sin embargo, la estricta y detallada coordinación garantiza que esta ayuda esté llegando a las personas más necesitadas en más de 50 cantones de las 7 provincias.
“Es importante dejar claro que el Banco de Alimentos no es el que entrega la ayuda directamente a las personas afectadas. Nosotros recibimos las donaciones de las empresas, las clasificamos y entregamos a las organizaciones, y son estas últimas las que distribuyen los donativos en las poblaciones en situaciones de vulnerabilidad que atendemos de manera conjunta”, mencionó Linares.
Voluntariado y sedes
El Banco de Alimentos cuenta con dos sedes. La sede central está ubicada en Pavas, en el Parque Industrial Condal y la segunda está ubicada en Santa Cruz, Guanacaste. En ambas trabajan 24 personas en diversas áreas, quienes han elevado las medidas de higiene, limpieza y distanciamiento social, para continuar con su labor de atención en este momento crítico en que la población en vulnerabilidad y riesgo social lo necesita más que nunca.
En el Banco además es apoyado por personas de manera voluntaria, quienes ayudan a clasificar los miles de kilos de productos que se reciben cada semana.
El Bando de Alimentos recibe donaciones todos los meses de al menos 250 toneladas de alimentos y artículos de primera necesidad, los cuales son distribuidos entre las 250 organizaciones que atienden a más de 40 mil personas en Pavas, Desamparados, Puriscal, Hatillo, Palmares, Talamanca, Upala, Limón, Puntarenas, Santa Cruz, entre otros.
Como lo ha hecho desde marzo de 2012, el Banco de Alimentos, las organizaciones sociales y las empresas solidarias que donan diversos productos y dinero, siguen apoyando de manera constante para luchar contra el hambre y la pobreza; y ahora más que nunca en medio de esta emergencia sanitaria.
En medio de la circunstancia, el Banco de Alimentos y sus colaboradores quieren recordarles a las personas afectadas que no están solas y que, así como la fe mueve montañas, la solidaridad y la empatía moverán en camiones montañas de alimentos y productos de primera necesidad.