En Panamá tiene un 54% de la cuota del mercado y está presente en el desarrollo de infraestructuras públicas, tales como la expansión de la ruta interoceánica, la línea 1 del Metro, el saneamiento de la bahía, así como la ampliación de la autopista Madden-Colón, aeropuertos y plantas hidroeléctricas. Para la elaboración del clínker que se utiliza en la primera de estas obras, Argos puso a funcionar una línea húmeda en su planta de Cartagena (Colombia). Hasta el primer semestre de 2013, ha despachado 450.000 toneladas de cemento al Canal, cerca del 68% de las 660.000 toneladas que se tienen proyectadas para toda la obra. Cada mes envía 25.000 toneladas de esta materia prima de Cartagena a Panamá.
Argos confía en el dinamismo de la economía canalera, por eso lejos de preocuparle la terminación de estos megaproyectos en corto plazo, está interesada en participar en planes pequeños y en las nuevas líneas del metro y en la ampliación de carreteras. Según la Cámara Panameña de la Construcción (capac), para 2013 el pib de construcción se ubicará en us$1.995 millones, representando un incremento del 10,66% con respecto a 2012.
En ese año, Argos obtuvo ingresos por us$2.432 millones y su acción se valorizó 83% en la Bolsa de Valores de Colombia. Su estrategia competitiva está basada en una clara segmentación de clientes, asistencia técnica, acceso a programas de financiación, redes de distribución, calidad, diversidad de productos y amplia cobertura geográfica.
Desde la llegada de Argos a Panamá en 2001, la organización ha invertido más de us$140 millones en ampliación y mejora en las instalaciones, desembolsos en materia ambiental y en la adquisición de nuevos equipos para hacer más eficientes los procesos de producción. Hoy la comercializadora y productora de cemento y concreto completó su proceso de llegada a Panamá, sustituyendo la marca Cemento Panamá por Argos. «Esta iniciativa permite que sus abonados accedan a un nuevo modelo de negocio centrado en el cliente y el desarrollo sostenible; es decir, económicamente viable, respetuoso de las personas y responsable y amigable con el medio ambiente», explica Mauricio Ossa, vicepresidente de la Regional Caribe de Argos, quien habló con Revista Summa en su planta cementera en Cartagena. Por otro lado, Enrique Olarte, gerente de la cementera en Panamá, coincidió con Ossa en que el cambio de la marca ocurrió cuatro años después de que Argos comprara la empresa Cemento Panamá y de haber comenzado una etapa de integración para alinear las operaciones y garantizar la unificación de sus procesos y servicios.
Lejos de posicionarse en escalones inferiores por el tamaño de su territorio, Panamá tiene un consumo de cemento per cápita anual de 600 kilos, mientras que la media en la región es de 200 kilos. «Panamá es un ejemplo a seguir sobre cómo se hacen las cosas para que el crecimiento de un país se mantenga. Por eso estamos muy interesados en la implementación de la marca Argos en ese país. No se trata solo de continuar transfiriendo tecnología y conocimiento, sino de traspasar todos los beneficios de acompañamiento, desarrollo y capacitación que tenemos en Colombia a nuestros colaboradores», agrega.
Negocio verde
La disminución de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y la reducción del uso de materiales no renovales son dos de las metas de sostenibilidad de Argos. Para ello, trabaja en proyectos de investigación e innovación como el uso de microalgas que capturen el co2 y en la fabricación de productos con materiales reciclados, informaron sus investigadores en el Centro de Innovación, Investigación y Desarrollo de la Universidad eafit en Medellín.
Los investigadores explicaron que están en la etapa de evaluación de diferentes tipos de microalgas que capturen co2, mientras obtienen las certificaciones colombianas para avanzar a la siguiente etapa de pruebas con cepas nativas. Y comentaron que tienen «una plataforma de evaluación de cepas con cuarenta fotobiorreactores de veinte litros, que simulan los gases emitidos por el proceso cementero. Estas microalgas también se podrían utilizar para generar biomasa».
En la segunda de sus investigaciones han desarrollado muestras de concretos elaborados con agregados reciclados, utilizando como materia prima subproductos de los procesos de demolición y residuos de obras de construcción. Estas nuevas mezclas ya se usan como pilotos en ejecución de obras. Argos tiene como meta destinar el 10% de sus ingresos a ese rubro en 2015. Encaminado en ese mismo norte, en su planta de Cartagena comenzaron pruebas industriales para utilizar neumáticos como combustible. En 2012, desembolsaron US$9,6 millones en innovación.
Estas iniciativas les ayudarán a cumplir sus metas de Política Ambiental, incluyendo disminuir en un 20% del consumo de agua por tonelada de producto; optimizar su gasto de materias primas, combustibles y energía, sustituir un 7,5% del consumo calórico de combustibles fósiles tradicionales por combustibles alternativos y biomasa en los hornos, y desarrollar productos con menos impacto biológico.
Objetivos y crecimiento
Argos está en expansión, pero no en su natal Colombia, sino en Centroamérica y el Caribe y eventualmente en el sur de Estados Unidos. «Creemos en que Centroamérica y el Caribe son mercados emergentes que tienen altas tasas de crecimiento, en donde nuestro modelo de negocio se despliega con total naturalidad, porque entra en un momento en el que ayuda a desarrollar el país. Está enfocado en fortalecer la reestructuración en los centros urbanos, lo cual es un común denominador en Centroamérica y en el desarrollo de las infraestructuras públicas y privadas», afirma Ossa. También en alianza con otras compañías están apostando a la bancarización de los colombianos, facilitándoles el acceso a los servicios financieros en sus municipios, contribuyendo al mejoramiento de su calidad de vida, al crecimiento y progreso de las regiones. A mediano plazo, la multilatina espera implementar proyectos de bancarización en Centroamérica.
Argos ingresó a Panamá como marca hace poco más de un mes, mientras que en República Dominicana y Surinam lo hizo hace menos de cuatro meses. A finales de septiembre de este año entró como marca en todos los países de la región en donde está presente, excepto Haití y Honduras.
Para continuar con sus planes de expansión y ampliar la eficiencia operativa en tres de sus proyectos (su centro de distribución en Cartagena, una fábrica en Cali y el aumento de la capacidad instalada en una planta en Estados Unidos), Argos colocó 250 millones de acciones preferenciales en mayo pasado, con lo cual obtuvo us$880 millones. Tras este paso, concretó la compra del 53,3% de las acciones de la multinacional Lafarge en Honduras. «La transacción incluye una eficiente planta integrada con proceso seco y una molienda con su respectiva instalación portuaria sobre el Océano Pacífico, con capacidad de producción de cemento de 1,3 millones de toneladas métricas al año», indican los ejecutivos de la firma.
Argos planea seguir creciendo en la región para que sus ingresos sean mayores en el extranjero que en su natal Colombia. Su estrategia se mantiene, aunque es parte de una investigación de la Superintendencia de Industria y Comercio en conjunto con cinco cementeras más de la nación sudamericana por supuestas prácticas contrarias a la libre competencia. Frente a esto, aclara que «Cementos Argos no ha participado y no participa en ningún tipo de acuerdo de repartición de mercado ni definición de precios, ni en Colombia ni en los demás mercados en los que compite. En el momento en que sea requerida, la compañía brindará toda la información a las autoridades competentes y, con la tranquilidad de haber obrado apegada a la ley, defenderá sus derechos y actuaciones con todas las herramientas y la contundencia que ésta le permite».
Recuadro
Capacidad instalada
Cemento: 15,6 millones de toneladas al año.
Concreto: 14,06 millones de metros cúbicos al año.
Empleados en Panamá: 500.
Empleados globales: 7.300.
Recuadro
Presencia
Países: once.
Mercados de exportación: 35.
Plantas de cemento: 11.
Mezcladoras: 2.000.
Plantas de concreto: 300.www.revistasumma.com