Copa está a la espera de que la FAA apruebe la documentación técnica para iniciar el proceso de inspección.
Por La Estrella
La suspensión de 21 aviones Boeing 737 MAX9 afecta más del 20% de la operación de Copa Airlines, que está a la espera de que la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) apruebe una documentación técnica para iniciar el proceso de inspección que permita su retorno seguro, dijo este martes 16 de enero el director ejecutivo de la empresa, Pedro Heilbron.
La aerolínea de bandera panameña suspendió el pasado 6 de enero las operaciones de las 21 aeronaves luego de que la FAA ordenara la medida para 171 aparatos operados en EE.UU. y otros países, a raíz de un incidente ocurrido el día anterior con un avión 737 MAX9 de Alaska Airlines, que perdió parte de su fuselaje en pleno vuelo.
“Esta medida implicó para Copa la suspensión temporal de 21 de nuestras aeronaves, lo que nos ha obligado a cancelar alrededor de 80 vuelos diarios o más del 20% de nuestra operación, afectando a miles de pasajeros”, dijo Heilbron en una declaración difundida por video.
Copa está a la espera de que la FAA apruebe la documentación técnica necesaria para iniciar el obligado proceso de inspección de las aeronaves, según explicó el líder de la aerolínea insignia de Panamá.
Esta revisión por parte de la autoridad estadounidense “está programada para llevarse a cabo esta semana”, añadió Heilbron, que sin embargo aclaró que Copa no tiene certeza “sobre su duración o sobre cuándo sería autorizada nuevamente la operación de las aeronaves afectadas”.
En todo caso, el equipo de operaciones técnica de la aerolínea ha llevado a cabo una inspección preliminar de los 21 MAX9 y está preparado para cumplir con las directrices de la FAA, a fin de retornar a las operaciones “lo más pronto posible de forma segura y confiable”, expresó.
Copa ha implementado medidas como el reacomodo de los afectados en nuevos vuelos lo más cercano posible a la fecha original de viaje y ha eliminado los cargos por cambio de fecha de vuelo o su cancelación definitiva, para enfrentar esta “compleja realidad” derivada de una situación fuera del control de la aerolínea, dijeron sus representantes.
El secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg, ordenó el pasado 19 de enero la inmovilización de todos los Boeing 737 Max 9 “hasta que sean seguros”, una medida que siguió a la emitida el 6 de enero por la FAA y que afectó a 171 aparatos.
“No hay una fecha concreta” de cuándo estos aviones retornarán a los cielos, dijo entonces Buttigieg, al tiempo que la FAA anunció asimismo la apertura de una investigación a Boeing por el incidente de Alaska Airlines, que no dejó víctimas.
Según datos de la empresa especializada de análisis de la aviación Cirium, hay 215 aviones MAX9 en servicio en todo el mundo.