Nicaragua prevé un crecimiento de entre 3,5 % a 4,5 % en 2022, con una inflación de 9 %.
Por EFE
El ministro nicaragüense de Hacienda y Crédito Público, Iván Acosta, presentó este martes ante la Asamblea Nacional (Parlamento) el proyecto de Ley del Presupuesto General de la República para 2023, que prevé un superávit de 130,9 millones de dólares.
El presupuesto para 2023 presenta una proyección de ingresos de 3.046,8 millones de dólares y el de gastos, por 2.915,9 millones de dólares, precisó el ministro Acosta, al presentar el proyecto ante el pleno.
«El resultado es un superávit presupuestario global 2023 de 4.726,4 millones de córdobas (130,9 millones de dólares), lo cual viene a contribuir con la política monetaria en materia de estabilidad y garantiza reserva de recursos de contingencia ante la incertidumbre en las perspectivas de evolución real de la economía mundial y otros riesgos fiscales», explicó el funcionario.
El ministro destacó que el presupuesto de ingresos para 2023, por 3.046,8 millones de dólares, es mayor en 20,2 % respecto al presupuesto de 2022, «siendo su principal fuente los ingresos tributarios, con 92,6 % de cobertura».
Eso «demuestra la suficiencia tributaria de las cuentas fiscales y el proceso de fortalecimiento de una de las fuentes permanentes del gasto público», resaltó.
En proporción del Producto Interno Bruto (PIB), los ingresos tributarios 2023 alcanzan 16,5 % y los ingresos totales 17,8 %, detalló.
CASI EL 75 % PARA GASTOS CORRIENTES
En tanto, el presupuesto de gastos para 2023, por 2.915,9 millones de dólares, es superior en 14,7 % respecto al presupuesto aprobado para 2022, con énfasis de prioridad en el gasto de inversión y el gasto corriente, indicó Acosta.
En proporción del PIB, ese monto del presupuesto de gastos para 2023 alcanza 17,1 %, «lo que es un poco menor a lo estimado del presupuesto aprobado en 2022, de 17,7 %, es decir inferior 0,6 puntos porcentuales», especificó.
El funcionario explicó que, «esta evolución dinámica del gasto de capital está asociada con mayores transferencias a las municipalidades e inversiones en infraestructura vial, en salud, agua potable y saneamiento y vivienda, entre otros».
Del total de gastos para el próximo año, según la iniciativa, 74,1 % estará destinado al gasto corriente y 25,9 % para el gasto de capital.
Además, 56,4 % estará destinado al gasto social, es decir, para los sectores de educación, salud, viviendas y servicios comunitarios, entre otros.
Además, 9,8 % del presupuesto estará dirigido para el orden público y seguridad y 3,3 % para defensa, según el proyecto.
En su intervención, el ministro Acosta dijo que el presupuesto «está formulado en un entorno internacional muy complejo», entre los que mencionó la situación geopolítica en Europa y las «medidas unilaterales agresivas de los centros imperiales para sancionar, como se ha vuelto costumbre, a proveedores estratégicos de energía, petróleo, gas, fertilizantes y alimentos».
PREVÉN CRECIMIENTO DE 3 % DEL PIB EN 2023
El funcionario explicó que el proyecto de presupuesto fue elaborado sobre una previsión de un crecimiento de la economía nicaragüense de 3 %, una inflación de 6 % y un deslizamiento de la moneda con respecto al dólar de 2 % anual.
Nicaragua prevé un crecimiento de entre 3,5 % a 4,5 % en 2022, con una inflación de 9 %.
La economía de Nicaragua creció un 10,3 % en 2021, el primer año de crecimiento después de tres años seguidos de cerrar con saldo en rojo, según el Banco Central.
La propuesta de presupuesto fue remitida a la Comisión de Producción, Economía y Presupuesto del Parlamento, para que la estudie y emita un dictamen.
El presupuesto de 2023 tiene que ser aprobado antes de que termine el presente año legislativo, el próximo 15 de diciembre, según las leyes del país centroamericano.