La ONU envió en mayo una misión exploratoria a Tegucigalpa en respuesta a la petición de Castro.
Por EFE
La presidenta hondureña, Xiomara Castro, anunció este lunes que una delegación oficial de su Gobierno viajará a Nueva York para reunirse con representantes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para garantizar la instalación de una comisión anticorrupción en su país.
La misión de alto nivel viajará mañana a Nueva York para «concretar la llegada de la misión internacional contra la corrupción y la impunidad», dijo Castro durante un evento público en el municipio de Juticalpa, departamento de Olancho, oriente del país.
La delegación oficial la encabezará el canciller de Honduras, Eduardo Enrique Reina, y el titular de la Secretaría de Transparencia y Lucha Contra la Corrupción (Stlcc) de Honduras, Ángel Edmundo Orellana.
El 27 de enero, al asumir el poder, la mandataria hondureña prometió retomar la lucha en el país centroamericano contra la corrupción, por lo que en abril le solicitó ayuda al secretario general de la ONU, António Guterres, para la creación de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Honduras (Cicih).
La ONU envió en mayo una misión exploratoria a Tegucigalpa en respuesta a la petición de Castro y se está a la espera de que Naciones Unidas confirme el siguiente paso para instalar la Cicih en Honduras.
El Gobierno hondureño entregó en agosto a la ONU los comentarios del borrador del Memorándum de Entendimiento para la instalación de la comisión anticorrupción.
El documento contiene las condiciones de compromiso para que el Gobierno de Honduras y la ONU avancen en la instalación de una comisión contra la corrupción e impunidad en el país centroamericano.
Durante el Gobierno de Juan Orlando Hernández (2014-2022), quien el 21 de abril fue extraditado a EE.UU. por tres cargos de narcotráfico y uso de armas, se instaló la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih), que dependía de la Organización de Estados Americanos (OEA).
La Maccih, la primera iniciativa del organismo hemisférico para combatir la corrupción en un Estado miembro, no pudo continuar en Honduras porque el Parlamento no le renovó un segundo mandato.