Crecimiento estable y constante de la economía incentiva expansión y consolidación de operaciones del sector terciario.
Por Revista Summa
El 2023 ha sido sinónimo de transición y recuperación para el mercado de oficinas de Ciudad de Panamá, gracias a la estabilidad de la economía, la Inversión Extranjera Directa (IED) y la ausencia de nuevos desarrollos. Las tendencias proyectan recuperación y búsqueda del equilibrio para los siguientes meses.
Así lo determinaron los expertos de Newmark Central America en su tercer reporte de mercado del año para el país canalero. De acuerdo con el informe, la tasa de disponibilidad de todo el mercado se colocó en 25.18%, una cifra que a pesar de que sigue indicando sobreoferta presenta la baja más representativa desde el 2018.
La notable recuperación registrada en 2023 se debe a un crecimiento económico estable y constante del país que otorga un sólido argumento para la expansión y consolidación de operaciones del sector terciario para el mediano y largo plazo.
Por otro lado, cada vez más empresas reconocen la importancia de crear entornos laborales más cómodos y eficientes que mejoren la productividad y el bienestar de sus empleados.
“El crecimiento de la IED en el país, al igual que los requerimientos de mudanza, consolidación y expansión de operaciones de firmas multinacionales del sector servicios y tecnología digital, proyectan una tendencia del mercado a la recuperación y búsqueda del equilibrio coyuntural, pero con demoras significativas en la toma de decisiones”, explicó Danny Quirós, Market Research Director de la empresa.
Principales hallazgos
Para el cierre de septiembre del 2023, el inventario del mercado de oficinas de Ciudad de Panamá se ha mantenido en 1,783,179 metros cuadrados (m 2 ) de área arrendable total, sin mostrar crecimiento desde finales de 2018.
Precisamente, esa ausencia de nueva oferta, la acumulación de demanda y la motivación de los propietarios por ocupar espacios ociosos desde hace varios años justifican la recuperación en la disponibilidad.
En cuanto al precio promedio de alquiler listado para el tercer trimestre del año fue de US$14.54 por m 2 /mes, mientras que el precio de cierre fue de US$14.35 por m 2 /mes, posterior a las negociaciones.
Según Danny Quirós, esa tendencia a la baja se justifica por el exceso de oferta disponible y la motivación de los propietarios por ocupar espacios ociosos desde hace varios años. “Se espera que los precios actuales presenten incrementos en los próximos trimestres considerando la recuperación de la actividad económica y la llegada de nuevas empresas al país y la expansión de las existentes”.
¿Qué se necesita para atraer más demanda?
De acuerdo con los expertos de Newmark Central America, es importante que los propietarios y desarrolladores de oficinas consideren aspectos que antes eran opcionales y hoy en día son indispensables.
Diseños colaborativos, estudio de preferencias de los inquilinos a través de análisis de datos, conectividad de primer mundo, espacios sostenibles y un retador nivel de personalización en diseño interior y precios son solo algunos de los elementos esenciales.
Además, ofrecer servicios y comodidades adicionales, como gimnasios, servicios de limpieza, áreas de cafetería, estacionamientos seguros y áreas de descanso para hacer que el espacio sea más atractivo, es algo esperado por los clientes.
Por otra parte, la conectividad de alta velocidad y la infraestructura tecnológica sólida son esenciales. Las empresas necesitan garantías de que podrán satisfacer sus necesidades tecnológicas, desde la conexión Wi-Fi hasta sistemas de seguridad avanzados.
“La pandemia ha destacado la importancia de la salud y el bienestar en el lugar de trabajo. Ofrecer sistemas de ventilación de alta calidad, iluminación natural y opciones de acceso a áreas al aire libre destacan entre las solicitudes más frecuentes”, comenta Quirós.
La ubicación sigue siendo crucial. Los espacios de oficina bien ubicados y fácilmente accesibles por medios de transporte público son más atractivos hoy en día para los inquilinos. Finalmente, este contexto también abre la puerta para que los dueños de edificios de segunda generación (espacios que ya han sido utilizados por otro inquilino previamente, han sido desocupadas y ahora están vacantes) puedan hacer lo suyo y atraer inquilinos con mejores precios, ubicación y flexibilidad.